En el último año y medio no hacemos más que ver el nombre de Ebri Knight por todas partes, generalmente cuando de festivales identitarios o reivindicativos se trata. Estos seguidores del Folk-Rock más festivo y Punk vienen desde los PP.CC., que para quienes no lo sepan son los Países Catalanes, según muestran en su propio logo. Esta cuadrilla barcelonesa va de cabeza a convertirse en un nombre fijo en festejos masivos como el Viñarock, así que conviene estudiar su caso.

Lo hacemos a cuenta de «Guerrilla», su último trabajo, publicado por Maldito Records. Los tres anteriores les han servido para crecer a pasos agigantados en su Catalunya natal, mientras incursionaban en territorios españoles, franceses y alemanes, hasta lograr totalizar una cifra de 170 conciertos.

«Guerrilla» es todo un tratado histórico y sentimental acerca del concepto político que se deriva de su existencia en lugares donde se lucha contra la injusticia y por un ideal. El poeta Miguel Hernández -del que toman la letra para su adaptación en castellano de «Vientos del Pueblo»-, las Brigadas Internacionales, el movimiento obrero o la resistencia nacionalista en el Kurdistán o Irlanda desfilan por esta galería de retratos insurreccionales o románticos. Su versión de «Viva la Quinta Brigada» pone en el foco en los voluntarios irlandeses que cruzaron Europa para defender la legitimidad de la República española, amenazada por el fascismo internacional.

Ebri Knight tienen un aire a los italianos Talco, alguna cosilla del punto celta de los estadounidenses Dropkick Murphys, ecos que ni ellos se imaginarían de los anglo-irlandeses The Pogues y mucho de los valencianos La Raíz, de sus extintos paisanos Dusminguet o de la alegría contagiosa de La Pegatina. No son más que nombres de mera referencia, porque el sexteto está en permanente evolución y de hecho se han ido rockerizando a medida que crecía su público. Han pasado tres años desde ‘Folc!’ y una natural ambición les ha llevado hasta esta rampa de proyección estatal.

Leo Cebrián Sanz