El guitarrista Luis Cruz, conocido por su larga trayectoria en el grupo Topo, acaba de editar su primer disco en solitario bajo el nombre «Luis Cruz y La Furgoband» y el breve y efectivo título de ‘Rocker’.

En esta segunda tanda de preguntas comentamos cómo han sido las reacciones ante su debut en solitario, hablamos de los próximos pasos de La Furgoband y de los inicios del propio Luis Cruz con Topo.


por Jon Marin


¿Contento con las reacciones de público y prensa hacia el disco, ‘Rocker’?

La verdad es que sí. Sorprendente: el disco se está vendiendo. Y digo que es ‘sorprendente’ porque está claro que vivimos una época en la que se venden pocos discos. Estoy muy contento. Y por otro lado me están llegando muy buenas críticas por parte de los medios. Gracias a todos desde aquí, incluidos vosotros, ja, ja…

-No hay de qué, Luis, el mérito siempre es de los artistas.

¿Te ha extrañado algo de lo que han escrito o te han dicho acerca del redondo?

No, pero me resultó muy gracioso el caso de un chaval que se compró el disco y vino a la presentación. Me dijo: ‘La primera vez que lo escuché, no terminaba de pillarle el rollo; pero ahora me lo pongo todos los días cada vez que salgo a correr’. (Risas).

¿Qué impresiones sacaste de esa presentación en directo en Madrid, el pasado mes de septiembre?

Totalmente positivas. Pude ver cómo, con el poco tiempo que lleva el disco en la calle, la gente cantaba todos los temas. Vi a la gente muy receptiva a todo lo que pasaba en el escenario. ¡Quiero repetir yaaaaaa…!

Pues eso, ¿hay más conciertos previstos?, ¿cuándo?

Estamos trabajando para hacer algunas actuaciones en invierno y que en el verano podamos vernos en los festivales. Os tendré informados de las confirmaciones de fechas en cuanto sea posible.

En la crónica escrita del concierto antes mencionado, nuestro compañero Leo Cebrián apuntaba: «Cruz maneja su guitarra con una personalidad única que le hace fácilmente distinguible». ¿Crees que este debe ser uno de los valores de un guitarrista, tener personalidad, algo que lo distinga del resto?

Sí, sin duda. Lo que desea cualquier musico es ofrecer algo que sea distinto de los demás y que se convierta en su señal de identidad. Por ello me parece un piropazo por parte de Leo.

Echemos una mirada al pasado. Grabaste con Topo ‘Ciudad de músicos’ en 1986. Eras muy joven (18 años) ¿Pensaste en algún momento que en 2017 seguirías en la banda, aparte de que ésta se mantendría viva a estas alturas?

La verdad es que en aquellos momentos todo me parecía que iba a ser eterno, pero viéndolo con la perspectiva de los años, flipo en colores. Porque José Luis Jiménez y Lele Laína se han convertido en parte de mi familia. Más que una banda, que lo es, también es una familia y sigo disfrutando cada vez que salgo al escenario con Topo. Por cierto, una de las últimas veces fue en la Plaza de Las Ventas de Madrid, en el festival y grabación de ‘Rocktiembre’. ¡Y hasta que el cuerpo aguante!

Como músico profesional que viviste la segunda mitad de los ochenta, la década de los noventa, la «00» y la actual. ¿Con cuál te quedas por las experiencias vividas?

Con los ochenta porque es cuando empecé profesionalmente en esto del Rock ‘n’ Roll. Y la década «00» -como tú dices- porque es cuando conocí al amor de mi vida, Helena, que además es la culpable directa de que se haya podido llevar este proyecto adelante y a quien estaré eternamente agradecido. Siempre digo que si me dejara mañana, ya habría vivido los mejores años de mi vida. Aunque tengo que reconocer que todas las épocas han tenido algo bueno para mí, me quedo con los ochenta por la cantidad de buena música en vivo y en directo que teníamos, sobre todo en Madrid, donde había más rockeros por metro cuadrado que en ninguna parte, je, je…

¿Y por el tipo de música que estaba en boga en cada una de ellas, cuál es tu favorita?

También los ochenta por la cantidad de música diferente que se compuso y la cantidad de artistazos que había.

Volviendo a Topo, ¿cuál es el mejor recuerdo que tienes con la banda?

El mejor recuerdo es el día que fui a probar para entrar en la banda. Allí estaban José Luis (Jiménez, bajista y cantante) y Víctor (Ruiz, teclista). ¡No me lo podía creer, eran mis ídolos! Y por supuesto, el día que tocamos en Las Ventas, en el festival que antes te comentaba, fue memorable y muy emocionante.

Continuará…