Cada vez más, el Rap está siendo invadido por mujeres con ganas de expresarlo todo y que no quieren callarse nada. Un buen ejemplo es el grupo Ira. Esta banda compuesta por cuatro mujeres está arrasando con todo a su paso desde que hace dos años difundieron su primera canción en Youtube. Las cuatro mujeres que forman este conjunto son Raissa, Medea, Sátira y Elvirus, quienes no han parado desde que se lanzaron a hacer Rap/Hip-Hop.  Su música ha conseguido atraer al público gracias a un leal compromiso con la causa feminista, un gran espíritu de lucha y sus duras críticas a la sociedad patriarcal en la que vivimos.

Las madrileñas nos cuentan a través de sus letras experiencias, reflexiones y sentimientos (la mayoría de rabia e indignación), buscando un público que entienda su enfado y reclutar almas que busquen luchar para conseguir la liberación de la mujer. Lo expresan con letras llenas de agresividad -como dicen ellas mismas en una de sus canciones: “tenemos mucha rabia acumulada“-; también con pena y tristeza, al contar todas las historias de mujeres que han sido y son víctimas. Pero sobre todo, Ira demuestra un poder en sus voces que las hace imparables. Sus bases también se aseguran en demostrar lo que quieren, con duras bases de Trap, muy actuales y que «empoderan» a quien las escucha.

Cuentan historias de mujeres que sufrieron y que fueron olvidadas -como en su canción «La ira de Toffana»- o critican de manera contundente y firme el machismo que impregna el Rap en ‘Rap Save The Queen’. Hablan de «bollo drama», como dijeron en su concierto del pasado viernes en la canción «Así se templó el acero» -prácticamente la única canción de amor que tienen- y llaman a sus «hermanas» para que comience el matriarcado en su último single: «Ladra». Las letras de Ira tienen una fuerza que al cantar se transmite de forma impecable. Hay frases que no se olvidan como «El machismo mata mucho más que ETA», con las que se arriesgan de una forma inteligente e impactante.

Ira tiene tres videoclips, en los que podemos disfrutar de la calle en estado puro, por ejemplo con vistas de Vallekas y mujeres bailando en «Jurao», un himno que incluye frases en latín en las que animan a ser libres y luchadoras. En ‘Rap Save The Queen’ aparecen imágenes de ellas solas en el Templo de Debod de la madrileña Plaza de España. Su primer videoclip fue «Mantenlo patriarcal», que creó y sigue creando controversia. En él se muestran por primera vez con mucha valentía, seguridad, desafío y una rabia que parece palpable en sus bailes de twerk, de Pole Dance y sus bragas negras con lentejuelas en la cabeza.

Con un álbum corto o EP compuesto de siete canciones llamado «Arte y Terrorismo» y las otros temas de su canal de Youtube, Ira nos sorprendieron en su concierto del pasado viernes 1 de junio en la Sala Caracol de Madrid. Las entradas estaban agotadas a seis días del concierto y aún había gente que pedía reventa de entradas. Como prometieron en sus redes sociales, la banda tenía preparada muchísimas sorpresas. Eligieron como teloneras a otra banda también compuesta por cuatro mujeres: Machete en Boca, que con su actuación dejaron el listón muy alto y calentaron muy bien el ambiente. Contaron con invitados como unos amigos raperos del barrio llamados Los Joselitos y otra rapera amiga llamada Estridente. Cada uno cantó un tema propio de su cosecha.

Ira hizo su presentación en directo cantando por primera vez en el escenario la canción ‘Rap Save The Queen’, además de presentar nuevas camisetas exclusivas en el merch. Dos de las componentes de Ira -Raissa y Elvirus- presentaron un nuevo tema; a su vez, tres bailarinas participaron en dos canciones -una de ellas bailarina profesional de Pole Dance en España-. Por último, una de las tres integrantes de la banda Tribade -Masiva Lulla- presentó un tema en solitario y propio para después volver a aparecer y cerrar el concierto con su interpretación de la canción ‘Gaupasa’, de su propio grupo.

El concierto, en definitiva, estuvo atestado de un público y un griterío que cantaba a coro las canciones y un escenario lleno de baile,  saltos… y mujeres -hacía mucha falta-. Muchas personas que estuvieron en Caracol se quejaron, ya que hubo algunos temas que se echaron en falta y lo cierto es que fue así. Pero también hay que decir que fue todo un espectáculo y dejaron al público con más ganas de Ira, tanto que incluso al salir se oía cantar las canciones a algunas personas del público. Fue un concierto lleno de sorpresas, de mucho cariño y dedicación. Esperemos poder ver pronto a nuestras compañeras sorprendiéndonos de nuevo con su «ira».

Itzíar Cebrián Aguirre