No sólo de Ronnie Romero vive la avanzadilla de los vocalistas nacionales que terminan entrando en bandas poderosas como Rainbow. El hispano-argentino Baol Bardot sigue la estela del hispano-chileno con su sorprendente fichaje por los noruegos TNT, después de una inesperada sorpresa del destino.

Hace apenas tres meses se producía la salida del grupo nórdico de su cantante Tony Harnell y el 22 de noviembre llegaba el golpe de efecto del estreno en la formación de su nuevo intérprete, nada menos que en un concierto de apertura para Scorpions. Las 8.000 personas que había en el auditorio Spektrum de la capital noruega Oslo conocieron sin previo aviso a un joven cantante, actor, músico y compositor que lleva años bregándose en esa excelente escuela que es el teatro musical. Su trayectoria profesional incluye títulos como ‘We will rock you’, ‘Forever King of Pop’, «Esos Locos Fantasmas» o «Jesucristo Superstar».

La historia de la entrada de Baol en el Olimpo del Hard Rock melódico tiene su miga, ya que fue elegido entre 80 aspirantes. Su única credencial de salida fue un vídeo subido a You Tube: «Grabé un tema de ellos, lo subí a mi canal, les mandé el link y me olvidé absolutamente», explicó a eldiario.es. Bardot relató al medio digital lo sucedido en los siguientes meses: «El verano pasado estaba tranquilamente en mi casa y recibí un e-mail (…) ¿Te vienes a Noruega con todo pagado y trabajas en mi disco en solitario?» (en referencia a Ronni Le Tekrø, guitarrista de TNT).

Finalmente no se trataba de un álbum de esas características, sino de un señuelo hasta que sus nuevos compañeros tomaran la decisión definitiva. «Estamos pensando en ti para la banda principal y no para el proyecto en solitario», le aclararon a la postre. Bardot se sincera al reconocer que «fue algo bizarrísimo y muy difícil de procesar. (…) Parece como si le estuviera pasando a otro».

Lo cierto es que este admirador de TNT desde su adolescencia ha visto premiada su calidad vocal con uno de esos trenes que a veces pasan en la vida… y que esta vez sí paró donde debía. No todo iba a ser malo en el mundo de la globalización y el acceso a la información en tiempo real. Aunque además de la suerte y el azar, seguro seguro que también tiene mucho que ver que nuestros vocalistas hayan empezado a dominar el inglés como lengua vehicular en la escena del Rock internacional. Llegamos con treinta años de retraso, pero bienvenido sea el cambio de tendencia…

Leo Cebrián Sanz