No sé jugar al mus, pero con esta gente me dan ganas de aprender. D’Órdago es el singular proyecto conjunto de José Plaza y José Antonio Sánchez. Ambos cantan y tocan la guitarra acústica, recuperando ese sonido de Rock Poético que tanto éxito obtuvo de la mano de artistas en solitario como Albertucho o Poncho K. Estos músicos andaluces vienen del formato eléctrico de bandas previas como La Cuenta La Vieja, Fundido a Negro o Kultura de Bar -con las que llegaron a editar siete discos-, pero han optado por el riesgo con su apuesta por la vestida desnudez de las canciones.

Su música tiene un inequívoco aire a los Extremoduro más puros -aquellas composiciones de Robe en acústico que no entraban en los discos- o incluso a los álbumes de Uge, uno de los componentes del grupo de Robe que hizo álbumes en solitario. También asoma por detrás del telón la barba de Kutxi Romero, aunque ya sabemos de dónde aprendió el «primo» navarro su particular forma de cantar y componer.

Este primer disco de D’Órdago consta de once canciones y una pista de regalo: la versión de «Madre anoche en la trinchera», que podemos escuchar tras su identitario «Ordagorock». El primer tema que promocionaron fue «Empercudío», el segundo de la lista tras uno inicial que comienza con una típica conversación de jugadores de mus. La copia del CD nos llegó envuelta en un precioso cordel de color verde, al que se amarraba una pequeña carta con los cuatro palos de la baraja y la imagen de la muerte asomada a sus dos lados -eso sí, con una guitarra acústica-.

Plaza y Sánchez debutaron juntos en directo el 9 de marzo de 2019 en Linares (Jaén), aunque de sus formaciones anteriores se desprende una ruta de conciertos que les ha llevado en múltiples ocasiones a Madrid (Caracol, Galileo y los desaparecidos Hebe y Jimmy Jazz). También se patearon Andalucía en sus diferentes actuaciones en Granada y Marinaleda (Sevilla), siendo ahora su Linares natal su principal zona de recitales. Van construyendo su edificio poco a poco, y algunos de sus ladrillos en vivo se los han traído desde Murcia, Granada, Sevilla, Málaga o Madrid, donde su música parece haber encontrado una positiva reacción del público.

En materia de concursos han sido finalistas en el certamen cacereño A Puño y Letra, repitiendo suerte en el Certamen Andaluz de Cantautores de Benalmádena (Málaga).

D’Órdago se reconoce como un dúo adscrito a la defensa de las causas solidarias (ecologistas, animalistas, enfermedades de escasa visibilización, internacionalismo…), por lo que siempre se muestran dispuestos a mostrar su compromiso social.

Leo Cebrián Sanz