por Jon Marin


 

En la entrevista que te hicimos en 2018 nos comentabas que te habías marcado el reto de grabar nuevas canciones cada año. Vemos que sigues cumpliendo lo prometido con la publicación de este nuevo EP (“Salida de emergencia”). ¿Han salido naturalmente las nuevas composiciones o has tenido que forzar la máquina para que nadie diga que faltabas a tu palabra?

No, para nada he forzado. Esta vez tenía muchas canciones y decidí dividirlas en dos trabajos, las más oscuras y pesadas terminaron en este trabajo, “Salida de emergencia”, y el resto, más melódico y fácil de digerir, fueron a parar a otro disco, ya grabado, del que os hablaré más adelante. Personalmente me gusta que las últimas canciones escritas sean las que marquen la dirección a seguir, pero tengo bastantes temas para grabar dos o tres sencillos más y sería una tontería en mi caso registrar un trabajo o canción que no me guste por el simple hecho de tener que cumplir; es más bien un propósito personal que me hice.

¿De qué músicos te has rodeado esta vez para dar vida a “Salida de emergencia”?

Esta vez Mega (el productor de sus tres anteriores trabajos) tenía una agenda muy apretada y resultaba bastante complicado encontrar un hueco para poder grabar con él en el plazo que yo quería, así que decidí ponerme en contacto con los hermanos Tejedor, que ya conocía de antes y siempre me apeteció grabar algo con ellos. Este era el momento pero, por problemas de compatibilidad laboral, yo sólo me acercaba a dar el visto bueno a las sesiones y ellos eran quienes tocaban la mayoría de instrumentos, limitándome yo a meter alguna que otra guitarra y la voz. También hay que destacar la intervención de Emili Gener al órgano Hammond, muy relevante en este trabajo, y Guillem Pons ‘Sito’ al saxo en “Duele”, canción en la que canto junto a Damià.

La producción, como nos cuentas, la han hecho Carlos y Damià Tejedor, este último ya había colaborado en anteriores discos tuyos, ¿verdad?

Sí, Damià hizo los coros en mi primer trabajo “Sueños imposibles” y ya nos conocíamos.

¿Y qué tal con ellos?, aparte de que ya nos has contado que les diste vía libre para grabar instrumentos…

Carlos y Damià tienen un largo bagaje musical, antes en Casa Rusa y ahora con su nuevo y tremendo proyecto San Damián. El trabajo fue registrado en su propio estudio, “Caja del ruido”, un sitio fantástico para grabar y ha sido una experiencia maravillosa. Aunque ellos siempre han tirado hacia un estilo más Pop, tienen un amplio abanico de gustos musicales, al igual que yo, y nos hemos entendido perfectamente. Aparte de que son dos tíos cojonudos con los que resulta muy fácil trabajar.

Nos contabas que solías componer primero la música y luego metías las letras, las cuales preferías que fuesen como relatos. ¿Ha sido el proceso igual con estas nuevas canciones?

Sí, creo que al tratarse de canciones, si la música no es válida, la letra no sirve de nada; para ello existen otro tipo de expresiones artísticas… Así que lo primero es asegurarse de que la música se sostenga por sí misma; ahora bien, una vez que tengo claro que la música funciona, no descanso hasta encontrar la letra adecuada.

¿Qué destacarías de lo que nos cuentan estos recientes cinco temas?

En este trabajo las letras han sido un punto de partida a la hora de agrupar las canciones puesto que todas ellas tratan de personajes que se desenvuelven en situaciones conflictivas de las que desean escapar, de allí el título del disco: “Salida de emergencia”. Son algunas de las canciones más oscuras que he escrito en mi vida y me siento especialmente orgulloso de la letra de “María Tragedias”.

(Continuará).