A raíz del estreno del primer avance del documental “Ellas son Eléctricas”, no fueron pocos los que nos preguntaron por la cortinilla de entrada y salida que sonaba de fondo en el tráiler que titulamos “Un estilo minoritario… o no”. El estribillo de Hard Rock en castellano que lo ilustraba pertenece al tema “Olor a cuero” y es obra de la formación más personal del gran guitarrista José Antonio Casal.

El antiguo componente de Pánzer quiso desmarcarse con una propuesta más afín a sus eclécticos gustos y en 1986 montó Clerr, un cuarteto en el que le acompañaron el bajista Rafa Sánchez, el batería Eugenio Luque -que había dejado el puesto en Sobredosis- y la protagonista de la reseña de hoy: Toñy Romero.

La cantante hizo una extraordinaria labor en la escasa producción discográfica de la banda, que se redujo a una maqueta compuesta por tres canciones: el ya citado “Olor a cuero” -que sonó bastante en las emisoras madrileñas y especialmente en el programa de Rafa Basa-, “Sombras” y “Pensando en largarme”. Toñy sigue viviendo hoy en día en Móstoles, al sur de la Comunidad de Madrid, de donde eran varios de sus compañeros de formación.

Casal no conserva la demo, pero por fortuna la grabación nos fue proporcionada por “Presi”, el dueño del bar rockero de referencia en Móstoles, el “Kamikaze”, sucesor del ya mítico “Carátulas”. Fue la propia vocalista quien se la cedió al “Presi” en su día, en una cadena que ha culminado con su parcial difusión pública gracias al documental.

Clerr, nombre que respondía a las iniciales de sus componentes, no llegó a concretar los ambiciosos planes que confesaron a la periodista Esther Vela en una amplia entrevista para la revista “Heavy Rock”. En ella afirmaban haber grabado dos de los temas en inglés (“Olor…” y “Sombras”), sin que por ello renunciaran al castellano como idioma de uso común en sus letras.

En este encuentro con la prensa especializada, Toñy declaraba: “Me siento muy bien porque me entienden. Para ellos soy un  miembro más del grupo, no me tratan como mujer. No me ponen las cosas más blandas por ser mujer”. Casal reconocía que las composiciones se habían concebido de forma específica para la voz de Toñy, y que la presencia de una mujer en la banda era una parte importante de su identidad.

Casal, Rafa y Eugenio, que por entonces ejercían de profesores de sus respectivos instrumentos, habían concedido la introducción de uno nuevo en la música de Clerr. El teclado, que iba entrando muy firmemente en el imaginario creativo de los músicos madrileños de Hard Rock, sonaba en las canciones de su paso por el estudio y tenían previsto su apoyo en directo, aunque oficialmente no formaba parte del grupo.

Su repertorio contaba con nueve temas en el momento de ver la luz la entrevista, pero sólo nos llegaron tres y el recuerdo de lo que apuntaba a gran proyecto se quedó en una propuesta que poco a poco fue desdibujándose. Es cuestión de tiempo, y a ello nos ponemos, que podamos escuchar en YouTube esas tres inolvidables canciones de Clerr.

Leo Cebrián Sanz