Corría el pasado 16 de octubre de 2021 cuando en una noche fría me dirigía a presenciar el concierto de una banda que tenía muchas ganas de ver en directo. Mi afición por descubrir y apoyar desde estas páginas nuevas formaciones en su estado natural es una parte importante de mi vida. Seguidor del primer trabajo que publicaron y todos sus movimientos en redes sociales, ya sólo me quedaba disfrutar cara a cara de un grupo que, ahora sí, puedo decir alto y claro que tiene un buen futuro por delante.

Profesionalidad, estética y humildad

Personalmente me considero fan, activista, agitador de nuestra cultura rockera. Pero hay ciertas actitudes por parte de los músicos que emprenden un proyecto musical de las que discrepo e incluso me atrevo a descalificar. No paso de largo tres puntos que considero importantes a la hora de montar un proyecto musical.  Sirva de primer ejemplo la profesionalidad.

Muchas bandas parten de una economía deficitaria, sin estar para muchos trotes e intentando hacer todo uno mismo. Por eso, en este punto podíamos meter mucha materia. Una de ellas es la gestión de redes sociales por parte de ese equipo de músicos que creen en su propuesta. Sin embargo, en este apartado hay muchas bandas que no saben o no quieren o se creen que con tener su Facebook actualizado es suficiente. Pero a veces ni eso.

Y es que sin quererlo, muchas veces eres público de primera fila cuando ves cómo algunos “artistas” promocionan su trabajo. Se pueden aprovechar las RRSS con cierto criterio y un punto de buen hacer a la hora de mostrarte al mundo. Si esa herramienta se utiliza bien, es un arma perfecta y eficiente para tu proyecto.

Otra cosa es justo lo opuesto. La verdad sea dicha: creo que no es serio ver pantallazos del móvil en el Facebook oficial, junto a las fotos de la formación, la caratula de la portada y la información de los miembros. Y menos cuando estos contenidos se vinculan a las llamadas perdidas, los mensajes sin leer y el nombre del operador. Incluso que recibas una llamada perdida del mismo “artista” que supuestamente está en promoción para que le devuelvas la llamada. Quizás se le acabó el saldo de la tarjeta prepago. Ironías aparte, opinad vosotros/as. ¿Es forma de publicitar seriamente un trabajo donde has invertido tiempo y dinero?

La segunda: una estética acorde con la música que prácticas. No, no me gusta ver a una banda en chándal o con una indumentaria parecida a cuando sus músicos acaban de llegar de una reunión gastronómica en pleno campo.

La tercera es la humildad. No creértelo hasta el extremo de sentirte Dios del Rock o un engreído de forma descomunal. Quizás tú, lector/a, puedes añadir más puntos a lo comentado, pero como pilares de un proyecto musical que está empezando, ¿qué os parece si arrancamos con profesionalidad, estética y humildad?

¿Por qué cuento esto? Pues porque la banda que os quiero presentar en este artículo tiene muy bien cimentados todos estos pilares. Si no, seguid leyendo. 

Un oasis para olvidarte de los problemas

Endernity es un juego de palabras, marca de la casa, que consigue emparejar End y Eternity. Para estos músicos su forma de entender la música supone un imán para todo aquel que quiera olvidarse de los problemas diarios. Circunstancias de la vida me permitieron charlar un rato en persona con Manuel Hernández, cantante de la banda. Fue en el pasado Rock Machine Festival 2021. Allí le trasmití mi opinión sobre esos valores a los que me he referido anteriormente.

El caso de Manu y Endernity es el de un buen puesto en materia de calidad musical y por supuesto una óptima posición en redes sociales, creando contenido y actualizaciones diarias sobre la banda. Qué decir de la página web, totalmente al día, para deleite de cualquier persona que quiera saber sobre esta formación.

Pero, ¿quiénes son estos músicos? Como es habitual, hasta que una iniciativa musical se afianza en lo que a miembros más o menos ya fijos se refiere, el desfile de componentes es una constante imparable. Nada de ello fue un impedimento cuando en este caso se unieron dos músicos de la escena underground de Toledo y Madrid. Nos referimos al citado Manu Hernández (voz y guitarra) e Israel Santas (bajo), que en marzo de 2019 decidieron tirar para adelante con un proyecto que emocionase con aires de banda clásica y a la vez un sonido más moderno.

Sin ánimo de complicaciones, la tónica diaria era tocar versiones en el local para pasar un buen rato. Hasta que bienvenido fue el día en que estos músicos se dieron cuenta de que sus ideas para temas propios empezaban a emanar, asumiendo así que querían llegar lo más lejos posible. Si, porque orquestas de Rock ya tenemos bastantes…

Pasó un tiempo hasta que la formación se afianzó de tal manera que entraron en sus filas tres nombres de la escena: Edu Brenes a la batería (Jorge Salán, Sherpa, Skunk DF…), Rodri Arias a la guitarra (Skunk DF, Nadye, Lulu, The Bon Scott Revival Show…) y el otro batería Eric Domínguez (Western Pacific, Noel Soto, Valdés, Don Skull, The Forty Nighters…). Este último participó en la composición y producción del primer trabajo, titulado ‘Disrupted Innocence’.

El disco fue grabado a mediados de 2020 en The Metal Factory. Sirva como anécdota que en la misma semana, cuando estaban grabando la parte del bajo y culminaba la instrumental, se declaró el estado de alarma. Esa inocencia quedó interrumpida por una pandemia hasta meses después.

Estos tíos hilan fino, hasta el punto de no querer ser una banda más. Sus influencias van desde Slayer y Megadeth a Pantera y Alter Bridge, pasando por grandes guitarristas y sin olvidar a nuestras grandes bandas. Cada canción y cada acorde del disco está tratado con mucho cariño, sin caer en copias. Fue un disco al que Manu dedicó mucho tiempo para la composición y los arreglos de los temas que componen el trabajo discográfico. Después se unió Edu Brenes, ayudándole sobre todo en la percusión de las canciones.

El productor elegido fue Pablo Rouss, que se encargó de exprimir a cada uno de los músicos, sacándoles lo mejor. El propio Manu ni siquiera se imaginaba que cantar limpio pasaría a ser una nueva experiencia a tener en cuenta. En definitiva, un barco que navegaba viento en popa, hasta el punto de que el citado Edu pasó también a las labores de producción artística y manager.

Acordes, Escuela de Música Moderna y un nuevo disco

Actualmente la banda está trabajando duro en lo que será su segundo disco en los estudios The Metal Factory, de Álex Cappa, donde él mismo está haciendo las labores de productor. Algunas sorpresas se están desvelando según avanza la grabación. Un ejemplo son las colaboraciones por parte de los alumnos/as de la Escuela de Música Moderna de Leganés.

Este centro inició su actividad en el curso 2007-2008 con el objetivo de cultivar el sentido musical de cada persona. Se trata de desarrollar la creatividad del alumnado con la idea de que afloren sus sentimientos musicales hasta el punto de los estudiantes lleguen a ser sus propios creadores musicales. Puedes aprender a tocar desde el ukelele hasta el piano o el saxofón y también canto. Todo ello, con profesores con una amplia experiencia como músicos profesionales y docentes.

Dentro del estilo que practican estos madrileños, de momento ya sabemos que los sonidos de violines y violonchelos -de la respectiva mano de Elisa y Aradia-, se darán la mano con un coro de voces infantiles, todas ellas de alumnos y alumnas de la citada escuela. Una bonita iniciativa de la que si todo va bien empezaremos a escuchar de manera oficial el resultado hacia el verano, con tres singles oficiales que la banda pondrá a disposición para todo el mundo.

Desde luego, el disco apunta maneras. Nos queda conocer la temática de las letras, pero sabemos que la tónica será similar. Digamos que podemos adelantar que serán reflexiones sobre temas muy sensibles. Siempre me ha gustado que los grupos de Rock hablen de problemas sociales. Endernity dedicó su primer larga duración a situaciones como las relaciones toxicas, la depresión, el Alzheimer, las redes sociales y hasta el holocausto en la Alemania nazi en formato mini-opera.

Incluso el tema ‘I dream that I can fly’ está dedicado a la propia madre de Manuel Hernández, que sufre de Parkinson. La banda ha contado con el apoyo de la propia Federación Española de Parkinson, entidad a la que se donaron los beneficios recaudados con la canción. Sin duda, una gran iniciativa para dar más visibilidad a una enfermedad progresiva del sistema nervioso que afecta al movimiento y que a fecha del 11 de abril de 2021 afecta a una cifra que oscila entre 120.000 y 150.000 personas. Estos músicos tienen claro no dedicar tiempo a la religión y la política, centrándose sus letras en problemas más actuales.

Si todo va bien, las fechas que se barajan para la salida del segundo trabajo de Endernity apuntan a partir de octubre del año en curso. Será cuando podamos disfrutar de un redondo que apunta a ser uno de los diez mejores de 2023. Estará disponible en las principales plataformas digitales, en formato físico y desde la propia tienda online de la web www.endernity.es.

Directos con visión internacional

La banda lo tiene claro en cuanto a su deseo de querer traspasar fronteras. Con un sonido preparado para dar ese salto y un inglés muy fluido y bien vocalizado por parte de su cantante, los contactos con el resto de mundo se van amontonando para trabajar fuera en cuanto se pueda.

Mientras tanto, la gira por nuestro país sigue su curso con alguna que otra modificación, debido la situación que vivimos. Aun se puede disfrutar de Endernity en las siguientes fechas ya confirmadas: 19 de marzo, Sala Black Bourbon (León); 14 de abril, Sala Hysteria (Madrid); 29 de octubre, Sala Babel (Alicante); 12 de noviembre, sala por confirmar (Barcelona); 26 de noviembre, Sala La Fábrica de Chocolate (Vigo) y 10 de octubre, Sala Spectrum (Murcia).

Ilusionados estamos los redactores de esta modesta revista cuando vemos y valoramos que hay bandas que tienen gusto y ganas de poder sacar su música hacia adelante. A pesar de que como dice el propio cantante, deberíamos estar más unidos y apoyar más el Metal para que nuestra música esté donde se merece.

No hay excusa. ¿Estáis preparados para “endernizaros”?

José Ramon Nieto “Kema Púas”

“Escuchar música te hace ser mejor persona y te limpia el alma. Si es Rock, mejor”.

Fotos: Miguel Ángel Príncipe («Reino de Sueños»)