Hace unos años tuvo lugar en la madrileña sala Galileo Galilei una rueda de prensa en la que el antiguo cantante de Platero y Tú se estrenaba en las lides de la industria musical masiva. Acababa de publicar uno de sus primeros discos en solitario y todo indicaba que su música estaba destinada a ganarse el favor del gran público. Aquella mañana el 80% de las preguntas de su comparecencia ante los medios fue formulada por redactores de esta revista, que no dudaron en apoyar este ascenso de Fito a los altares del reconocimiento popular.

Mucho tiempo (y una pandemia) después, el bilbaíno acudió a una de las salas promocionales del Wizink Center a presentar su nuevo álbum: «Cada Vez Cadáver». Lo hizo arropado por mucha de la gente de su compañía, Warner Music, además de un buen número de periodistas musicales habitualmente poco cariñosos con el Rock, pero a los que el fenómeno Fito Cabrales ha logrado cautivar. También estuvieron los componentes de Morgan, la banda telonera de su próxima gira, y un presentador de lujo: Iñaki López -hasta hace unos meses presentador del programa de televisión «La Sexta Noche»-, quien comparte con su paisano el gusto por el Rock and Roll más puro y guitarrero.

Rueda de prensa a partir del minuto 13:45

Fito y sus Fitipaldis han hecho un álbum de diez temas, nueve de ellos compuestos justo antes de la hecatombe por Adolfo Cabrales junto a su productor de confianza: Carlos Raya «por siempre Sangre Azul». El disco es el séptimo de su serie en solitario, tras otros tantos años de silencio editorial. El videosingle elegido es el que da título a toda la colección. Esta vez el hombre de la eterna visera ha sacrificado su instrumental de costumbre. En su lugar podría haber incluido una canción de Quique González -de quien habló mucho y muy bien durante la charla-, pero Fito ha preferido incluir en el repertorio una versión de «Transporte», obra de su admirado Jorge Drexler.

El pasado verano pasé una cena completa escuchando una lista de reproducción en bucle de la música de Fito y su cuadrilla. Fue un alivio que no sonara C. Tangana por los altavoces del restaurante, un momento mágico que me ayudó a entender que Fito es mucho más que «Soldadito marinero». Días después fui a ver la película española ‘The cover’ y el protagonista se estrenaba en las lides de los escenarios de los hoteles de Benidorm con esta misma canción. Quién sabe, quizás me vean por algunos de los conciertos con los que va a recorrer todo el territorio en 2022. Ya va siendo hora de reconciliarse con la camiseta de rayas horizontales azules y blancas…

Leo Cebrián Sanz