Vuelve la escena bilbaína a sumar focos de interés en esto del Rock del siglo XXI. Esta vez se trata de una formación de Rock Alternativo nacida en 2011, que se define como «contundente y sensible, melódica e inesperada». En esta cesta hay mimbres del Heavy Metal más clásico, Punk, Grunge, Funk, Indie Pop y hasta Soul, aunque siempre sobre un diseño artesanal de sonido potente e intensidad sensorial. Atención a su máxima: «Hoax AttAck es nada y todo al mismo tiempo, una mentira absoluta y la única verdad».

Xabi Robredo (voz), Javi Voodka (guitarras y coros), Sergio Parrowsky (bajo) y Maikel Romero (batería) buscan de forma consciente la sorpresa y lo inesperado, dentro de unos patrones concretos que sin embargo tratan de poner en cuestión constantemente. Su manera de enfocar la fusión de influencias de cada músico parte de la falta de prejuicios, procurando recetas de slow music, es decir, canciones cocinadas con paciencia y amor por el detalle.

Su opción por el castellano como lengua de expresión es en sí misma una apuesta, ya que no se produjo hasta la entrada de Xabi. Por su parte, Sergio y Javi ya se conocían desde niños y habían coincidido en varias bandas. Maikel era la pieza rítmica que les faltaba, y la engrasaron desde un planteamiento abierto al que no fue ajeno el uso del doble bombo.

La primera maqueta de Hoax Attack tardó dos años en aparecer, pero supuso un aval que en ese mismo ejercicio les permitió ganar un concurso local en Santurtzi. También obtuvieron el segundo puesto en el certamen Osintxu Musikara en 2016 y se proclamaron vencedores en 2018 del III Memorial Nacho Monteagudo, en la localidad albaceteña de Villamalea.

Sus distintos galardones venían apoyados por la edición a finales de 2015 de las siete pistas de su disco «Indulgencia», repertorio que durante ese año y el siguiente presentaron en una veintena de fechas en directo. El álbum fue grabado en los Chromaticity Studios, por lo que mal no sonaba, no. Cada vez que una banda del Norte decide apostar por estas instalaciones para inmortalizar sus composiciones, el resultado es óptimo. En este último curso han seguido experimentando nuevos sonidos de cara a su siguiente producción, en la que de hecho ya trabajan desde el pasado mes de enero.

Leo Cebrián Sanz