Aprovechamos que se sigue celebrando con gran éxito la exposición “Madrid Metal” para reseñar el último libro relacionado con la música Heavy de uno de los dos comisarios de la muestra: el ilustrador Miguel B. Núñez. El dibujante que dio pie a la muestra del Palacio de Cibeles fue “metalero” en su juventud y plasmó con maestría sus recuerdos de los años 80 en dos celebrados títulos: “Heavy 1986” y “Heavy. Los chicos están mal”, publicados por la editorial Sapristi en los respectivos años 2016 y 2017.

La misma marca volvió a editar en 2020 una especie de spin-off o volumen paralelo titulado “666”, protagonizado por el Venom, uno de los personajes secundarios que pululaban por la línea argumental de las dos anteriores novelas gráficas. Miguel, que comenzó dibujando para la revista Thrash Metal, siempre se sintió atraído por la parte demoníaca y oscura de los grupos de Black Metal, por lo que de algún modo se debía a sí mismo un acercamiento a los estilos más extremos con una historia específica dedicada al ocultismo y el satanismo.

La historia que cuenta “666” está ambientada en el verano de 1986, cuando la excursión campestre de dos parejas de amigos -dos chicas y dos chicos- se tuerce del todo ante la sucesión de extraños sucesos que acaecen tras la irrupción del Venom. Hay mucho del cine de terror más referencial en esta propuesta de Miguel B. Núñez, quien lleva a sus personajes hasta un bosque solitario, una casa inquietantemente aislada e incluso los túneles de una gigantesca presa.

Las sorpresas inesperadas surgen a cada giro de guión, como si de escenas de una “peli” de serie B se tratara. Los pentagramas diabólicos y muchos de los elementos tradicionalmente vinculados a las logias y magias oscuras salpican las viñetas de este divertido entretenimiento visual, en el que no faltan el tradicional sentido del humor de Miguel y una cariñosa complicidad con los caracteres recreados. El artista gráfico cumple con la norma del final inesperado y juega con el lector mediante su última secuencia gráfica -el epílogo-, lo que deja un buen sabor de boca a la lectura completa del tomo.

Además, Miguel ha procurado una lista final con “Las canciones que han acompañado esta misma negra”, en la que recomienda y data 25 temas que perfectamente servirían para la banda sonora de una versión animada de “666”. Su selección de bandas comienza en 1968 con ‘Sympathy for the devil’, de The Rolling Stones, y finaliza con ‘Depth Of Satan’s Eye’, de Ghost.

Leo Cebrián Sanz