Apadrinados por Carlos Escobedo (Sóber), los madrileños Megara están dispuestos a saltarse la alta valla que separa a las bandas emergentes del relevo generacional. Han invertido en crear una propuesta fresca y dinámica con el fin de atraer público joven, ansioso de de disfrutar a un precio asequible de espectáculos de nivel internacional.
Megara consiguió abarrotar el pasado 18/11/2016 la sala Chango Club y atraer la atención de prensa especializada y músicos arraigados en Madrid (Pepe Mari, de Bella Bestia, o Javier Endara, de Maverick, entre otros), algo que tiene mucho mérito teniendo en cuenta la saturación de conciertos en la capital durante los fines de semana. Por ejemplo, a menos de dos kilómetros, según San Google, estaban actuando los veteranos Muro.
El show comenzó desde la entrada en la sala: photocall, sorteo de una guitarra, fotógrafos por toda la discoteca, golosinas en el puesto de camisetas… Y el espectáculo no decayó en ningún momento durante toda la actuación de la banda encabezada por la vocalista femenina Kenzy, muy bien escoltada por Pol (batería), Pablo (bajo) y Rober (guitarra). Megara desplegó todo tipo de recursos para deleitar a su entusiasta público; desde máscaras y maquillajes propios de bandas góticas, pasando por dos sugerentes gogós que juguetearon con Kenzy, hasta un unicornio hinchable en el que la vocalista navegó a través del público y la grabación de un vídeo manequeen challenge. La cámara recorrió toda la sala, desde la zona trasera hasta el escenario, recogiendo la imagen congelada de fans y músicos dando la sensación de fotografía tridimensional.
Los temas registrados en “Siete” centraron el concierto desde el inicio con las explosivas canciones “Atajo al cielo” y “En llamas”. Para completar el repertorio también sonaron versiones metalizadas de Pop como «I kissed a girl» (Katy Perry) o «How does it feel (Tonight Alive)» y, como broche de oro, la banda madrileña interpretó “Seis” en una auténtica explosión de júbilo y confetis que nos dejó con muy buen sabor de boca.
Destacaremos el dinamismo del grupo, especialmente de su frontwoman Kenzy, un volcán en escena capaz de liderar con naturalidad el espectáculo y mantener un buen nivel en la interpretación del repertorio. Si Megara pone el mismo énfasis en madurar su sonido, darán mucho que hablar.
Texto y fotos: Javier del Valle
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