Mortal Maze es una banda segoviana que tiene mucho que ofrecer, ya que hace apenas tres meses han dado a conocer un primer disco titulado como el propio grupo. Aunque el álbum comienza de forma muy
pausada con la intro ‘Through the triptych’, enseguida se produce una explosión de Speed y Thrash Metal a cargo de sus cinco ejecutores: Héctor Velasco (voz y guitarra), Diego de la Viuda (guitarra y coros), Fernando López (bajo y coros) e Iván Velasco (batería).

Los cuatro componentes del grupo han hecho el camino de vuelta respecto a las versiones, ya que a partir de 2016 evolucionaron desde un repertorio ajeno con Metal Symphony hasta sus propias y aceleradas composiciones, en una línea de trabajo que les ha conducido a donde ahora se encuentran. El
fichaje de Fernando a las cuatro cuerdas -quien procedía de Hijos de Overon- marca el inicio de esta nueva etapa, siendo dos años después cuando firmaron su primera demo.

Los temas que más populares les hicieron entre el público especializado fueron los dos que
mejor resultaron dieron en la anhelada interacción entre audiencia y músicos : ‘One more beer’ y ‘Beyond the end’. Ambos formaron parte de su maqueta en 2020, cuyos cinco pistas completaron con el
identitario ‘Mortal Maze’, ‘Ghosts’ y ‘Burn church burn’. Todos estos títulos se incluyen en su estreno oficial, a cuyo contenido se han añadido las poderosas ‘From here to the nothingness’, ‘Social zombie’, ‘The eyes are cut’, ‘A new hope’, ‘Deathmination’ y ‘At the dark shadow of God’.

La música del cuarteto toma elementos de otros estilos para triturarlos a su manera, como el Power Metal o el Black Metal. Se han rodado bien en directo, porque suenan compactos y pétreos, bien coordinados y compensados en todas sus filas- como un buen equipo de fútbol-. Así lo han demostrado en Segovia y provincia, además de un buen número de ciudades de Castilla y León y varias de las capitales españolas con mayor colectividad musical afín a la «caña» y el desenfreno -principalmente en el norte de la península-.

Muchas veces han formado parte del cartel de festivales solidarios o pequeños encuentros especializados de los resistentes del Thrash. Esa vasta experiencia en vivo resulta vital para establecer diferencias entre ellos y tantas otras formaciones que primero graban un disco y luego salen a la carretera. Y como dijo Manolo Jumilla Pandero, el «albañil y pensador» de la serie «Manos a la obra»: «Qué error… qué craso error…»

Leo Cebrián Sanz