Además del presentador y doblador de cine que tan querido fue hasta su muerte, Constantino Romero es el nombre del autor de todas las canciones del grupo Queeso y los Ahihajay, en cuyo seno canta y toca las guitarras. Es otra referencia nacida en los albaceteños estudios Saffron, en la localidad de Casa Hita, donde los arreglos han corrido a cargo de Emilio Martínez (guitarra) y Yone Martínez (batería, coros y teclas, además de firmar la producción completa). Junto a ellos y «Constan» Romero está también el bajista Joaquín Ortiz. El joven Lorenzo Romero pone su voz en el tema que da título al disco, «Hijos del sol», del que ha escrito la letra.

Las trece canciones de su álbum de debut beben de las guitarras de Rosendo y la voz de Albert Pla. También nos recuerdan a Burning, Tranquilitos, Siniestro Total o incluso Mamá Ladilla y el resto de sus títulos dan buena cuenta de su intención argumental: «Sol», «Babe», «Enamórate», «Locos por el Rock», «Lo más hermoso de todo», «Super Yo», «Jipi maniquí», «Juliet», «Monstruo de la lengua verde», «Zarapito», «Víctimas» y «Revolución».

Leo Cebrián Sanz