Richie Faulkner, guitarrista de Judas Priest, ha publicado hoy en redes sociales que se encuentra «muy fuerte y con actitud positiva» cuando no han transcurrido ni dos meses desde que se sometió a una operación que le salvó la vida. El 26 de septiembre el guitarrista sufrió una disección aórtica cardíaca aguda durante una actuación en el festival Louder Than Life y lo operaron de urgencia tres cirujanos especialistas en el corazón, en una intervención que duró diez horas.

Faulkner está ahora recuperándose en su casa de Nashville y ha escrito:

«¡Hola, fanáticos! Solo quería escribir algo por todos los que me pedís novedades sobre cómo va mi recuperación. Pude regresar a casa diez días después de mi operación para continuar con la recuperación. Han pasado siete semanas desde la noche en que todo sucedió y ahora me siento muy fuerte y positivo. He cicatrizado muy bien y definitivamente puedo ver la luz al final del túnel. Estoy caminando bien, me muevo con libertad, estoy bastante activo y comenzaré la terapia cardíaca muy pronto. Toco la guitarra todos los días y, con el amor y el apoyo de mi familia, el apoyo continuo de vosotros y la inspiración que recibo de la guitarra, ¡volveré al escenario en poco tiempo! Mis cirujanos están muy contentos con mi progreso y han reservado entradas de primera fila para el próximo concierto de Priest, ja, ja… Este mes es Acción de Gracias y, lo celebréis o no, tengo mucho que agradecer este año; también a todos vosotros por vuestra paciencia, amor y apoyo. Mucho amor y os veré frente al escenario pronto con los cuernos en alto

Sobre el momento del suceso mientras el guitarrista de Judas Priest actuaba, el mismo Richie comentó: «Mientras veo imágenes del festival Louder Than Life en Kentucky, puedo ver en mi cara la confusión y la angustia que sentía mientras tocaba ‘Painkiller’ cuando mi aorta se rompió y comenzó a derramar sangre en mi cavidad torácica.»

Más tarde añadió: “Me sentí un poco mareado, no ido del todo. Nunca me había desmayado antes, pero sabía y sentía que me iba a desmayar en un minuto. Estaba a la mitad de la canción, así que, obviamente, continué, tenía que terminar la canción. Si hubiera sabido la importancia del hecho, tal vez me hubiera marchado del escenario un poco más rápido. Pero no tenía ni idea de qué era, qué me pasaba”.

Más comentarios de Faulkner sobre el suceso: “Experimenté un dolor agudo mientras bajaba del escenario. Fue entonces cuando explotó. Ahora, cuanto más leo al respecto, más asombroso me resulta pensar que incluso llegué al hospital, más el tiempo que pasó hasta que me operaron… Es increíble, no sé cómo estoy todavía aquí”.