Ahora que la pesadilla del confinamiento comienza a despejarse, nos ha apetecido rescatar una de las iniciativas más curiosas desarrolladas en el periodo anterior a la vacunación masiva. Lo curioso es que ha sido una poderosa imagen la que nos ha vuelto a poner sobre la pista de Suka. Cual escena de conflicto bélico, impresiona ver una batería cubierta con una lona de camuflaje y a músicos con estética caqui tocando junto a lo que parece un helicóptero derribado en combate. Tras esta impactante escena se esconde la nueva aventura artística y conceptual de un músico legendario de la escena metalera vizcaína: el bajista y ocasional cantante Iñaki Susunaga.

El músico ha estado reflexionando sobre lo que ocurría con el Covid-19 mediante varios temas y videoclips monotemáticos, ya que todos ellos abordaban las sensaciones del enclaustramiento obligado. Junto a él participaron en la grabación buenos colegas como Arbi a la guitarra y Carlos Creator programando la batería en sus propios The Rockstudios. Como la cosa iba de soltar los demonios provocados por el bautizado por el propio Suka como «Rockfinamiento», la grabación de aquel primer videoclip titulado «Blanco y negro» se hizo en los exteriores de la costera localidad de Mundaka. Que para interiores ya habíamos visto muchos entre las cuatro paredes de nuestras casas…

La cuadrilla comenzó a ampliarse con la voz de Roxa Almeida (Sabotaje) y el solo de guitarra de Íñigo de la Campa en «Quiero volver», otro himno de desahogo esta vez desde Erandio, Barakaldo y el puente colgante de la ría vizcaína, entre otras localizaciones. Ese mismo 23 de diciembre del pasado año que se dieron a conocer los audiovisuales ya descritos lo hizo también el canto a la «Solidaridad» de la cantante Marián y el batería Edu Martínez. También ellos pusieron su talento al servicio de las composiciones de Suka, que escribió en exclusiva las letras y músicas de todos estos apuntes compartidos sobre la crisis de 2020.

En esta iniciativa tan colectiva no podía faltar la histórica Marilu -actualmente en Alma Culter-, quien puso su garganta para interpretar los versos de «Libertad», un grito desgarrado junto a sus siempre compañeros Arbi y Suka, a quienes se sumó Ángel Arellano con su solo de guitarra. El «Rockfinamiento» volvió a respirar aire limpio desde el verde de Arboleda, Bakio y Bermeo.

Hace un mes el proyecto se reactivó con «Necesitamos» -con Axel a la voz y los arreglos vocales, Ran Richard en la guitarra (solo incluido) y Andoni Pitt a cargo de la batería-, ahora desde el cielo de Basauri. Fue el paso previo al recientísimo último capítulo de esta serie distópica: la instrumental «Inyektor». Los mismos músicos se meten de lleno en una instalación de paintball para ilustrar visualmente un tema guitarrero y poderoso como pocos.

Leo Cebrián Sanz