Esta semana la escena rockera vitoriana está de celebración con el regreso en directo como teloneros de Grave Digger de una de sus formaciones más veteranas de ida y vuelta de los escenarios. Se trata de T-TreintayCuatro, que muy oportunamente han titulado su primer disco editado con el nombre de “Reignición”. La apertura para los alemanes es todo un reconocimiento a la labor de este quinteto, integrado en 2021 por Alberto ‘Perseveranth’ (voces), Luis Romero e Ion “Rail” (guitarras), Fulgen Zaca (bajo) y Jose “Zorrostiaga” (batería).

El grupo nació en 1983 por iniciativa de Jose, Jesús, Koldo y Mikel, cuatro animosos compañeros de clase, que sintetizaron en sus propias creaciones las influencias de sus favoritos Judas Priest y Black Sabbath. Un año después se estrenaron en directo junto a Hydra, Yugular, Piruleta de Hormigón y Osiris en el Polideportivo local de Landázuri. Su despedida se fechó el 9 de noviembre de ese mismo año, cuando abrieron para los siempre presentes Piruleta de Hormigón.

Los por entonces conocidos como T-34 grabaron una demo promocional con las canciones “El esclavo de la niebla”, “El ascensor”, “La idea” y “Deja ver al de atrás”. En sus letras trataban sobre la droga, tan presente por desgracia en las calles en aquella época, además de vivencias tanto personales como musicales. Por desgracia, el servicio militar de José impidió una continuidad para el proyecto.

La máquina del tiempo se traslada ahora a 2019, cuando Jose –a la sazón en Perseveranth-, sugirió a Ion recuperar composiciones de T34 y que Alberto grabara las voces. Los antiguos componentes de la alineación original no pusieron pegas a la iniciativa y ya sólo hubo que esperar la incorporación del guitarrista Luis y el bajista Gaizka -sustituido por Fulgen en el verano del pasado año-.  

Además de servir como denominación global al conjunto, “Reignición” es un tema datado en 2020, un año después de que se escribiera otra de las piezas inéditas de este EP o mini-CD: “Bestia de Metal”. Al mismo tiempo, la banda ha regrabado dos de sus temas de los 80: “El esclavo de la niebla” -concretamente de 1983- y “Salto de fe”, que data de su segundo y último año de vida. La guinda la pone su adaptación de una canción de Zorrostiaga, una banda hermana muy conocida en Gasteiz. El tema elegido es, precisamente, “Zorrostiaga saloon”, que se escribió en 1986. El álbum es un trabajo conjunto de Lullabye y Wild Metal Records.

Leo Cebrián Sanz