Les bastan 37 minutos para poner patas arriba la casa. El Rock and Roll más eléctrico funde los plomos de una instalación compuesta por diez terminales o canciones, cuyo voltaje oscila según el tema. Da igual que los músicos sean de la localidad extremeña de Quintana de la Serena, porque se mueven en unas coordenadas tan internacionales como el Sleazy escandinavo o el Hard Rock de Sunset Boulevard, en su deriva más canalla y peligrosa tipo Buckcherry. Tampoco le hacen ascos a la suciedad propia de un garaje, en una fértil convivencia con el Punk Rock más comercial y hasta juvenil. Incluso se atreven a hacer una versión de Devo en ‘Girl U want’, una banda que poco o nada tiene que ver con sus iniciales postulados artísticos.

Los estribillos corren con comodidad por una autopista de melodías de buena musculación musical, que cuenta con la asistencia técnica del equipo formado por el vocalista Sean “Flecha” Swindle, el guitarrista Diego Leone ‘Dean Demon’, el bajista Juan Antonio Sánchez y el batería Fernan Benítez. Pueden endurecerse como en ‘The wildest ones’, pero siempre conservarán una cierta contención a la hora de evitar la «pasión por el (mero) ruido». ‘Running to you’ ha sido su single de presentación del trabajo desarrollado en estos últimos años, que en su conjunto les ha hecho ganar en visibilidad y aceptación crítica y popular.

La historia de The Buzzos se remonta a quince años atrás, cuando dieron inicio a una carrera que incluye los siguientes grabaciones: las demos ‘Rock ‘N’ Roll Suicide’ (2002) y ‘Lonely Boy EP’ (2003), el álbum ‘Take It Like A Man’ (2005, reeditado por Psycho Poems Records un año después), las siete versiones de ‘Buzz On The Tracks’ (Psycho Poems Records, 2006), el EP de cinco canciones ‘Kings Without A Crown’ (2008), el EP ‘New Age Of Rock’n’Roll’ (2010), ‘Nowhere Train’ (Maldito Digital, 2011) -segundo de los discos oficiales que el cuarteto considera como tales-, las cuatro pistas de ‘Lazy Days Vol. 2’ (Maldito Digital, 2014), las seis de su gemelo ‘Lazy Days Vol. 1’ (2015) y el actual ‘Red’ (2018), editado con el mismo sello que sus tres últimas producciones.

El grupo es uno de los más relevantes a escala regional, donde en 2011 y 2012 ganaron un par de galardones de los siempre necesarios Premios de la Música Extremeña. Son la típica formación cuyo principal objetivo es el directo, ya que su vocación por levantar los culos y los corazones habla por sí sola. Han llegado a la formación de cuarteto tras numerosos cambios de músicos, tanto en estudio como directo, limando su visión musical hasta convencerse de que siendo cuatro suenan más certeros y con pegada que con las posibilidades de una segunda guitarra.

Leo Cebrián Sanz