Los tres miembros vivos de la formación original de KISS –Paul Stanley, Gene Simmons y Peter Criss– fueron ayer homenajeados por el Kennedy Center y se les entregaron sus medallas de manos del presidente estadounidense Donald Trump durante una ceremonia en el despacho oval de la Casa Blanca. La correspondiente al recientemente fallecido Ace Frehley -guitarrista- la recogió su hija Monique.
Este año también han sido premiados el actor Sylvester Stallone, los cantantes Gloria Gaynor y George Strait y el actor y cantante Michael Crawford.
Los premios Kennedy Center Honors, el máximo reconocimiento a las artes escénicas en Estados Unidos, los otorga el John F. Kennedy Center for the Performing Arts. El actual presidente de la junta directiva del Centro Kennedy es el presidente de EE. UU., Donald Trump.
El presidente de Estados Unidos dijo sobre los protagonistas que era “quizá el grupo de homenajeados del Kennedy Center más lograda y renombrada jamás reunida”.
Trump calificó a KISS como una “increíble banda de rock” y reconoció a Ace, “que ahora descansa en paz”, añadiendo que la “hermosa hija del guitarrista está aquí para aceptar el premio”. Tras ponerle la medalla a Gene Simmons dijo que era un buen y viejo amigo.
Según Billboard, Ace se ha convertido en la tercera persona que recibe un Kennedy Center Honor de manera póstuma, después de otros dos músicos que igualmente murieron tras anunciarse los premios de sus bandas: Glenn Frey de Eagles y Phil Lesh de Grateful Dead.
El día de la muerte de Frehley, Gene Simmons mencionó el Kennedy Center Honor en su declaración: “Tenemos el corazón roto. Ace ha fallecido. Nadie puede tocar el legado de Ace. Sé que él quería a los fans, me lo dijo muchas veces. Más triste aún es que Ace no haya vivido lo suficiente para ser homenajeado en el evento de los Kennedy Center Honors en diciembre. Ace ha sido el soldado eterno del rock. ¡Que su legado viva para siempre!”
El presidente estadounidense Donald Trump anunció a los homenajeados en agosto durante una rueda de prensa en el centro de artes escénicas.
Durante su primer mandato de cuatro años Trump no prestó atención al Kennedy Center y se saltó varias veces la ceremonia de los honores. En esta legislatura prometió transformar el gran centro artístico, expulsó al consejo directivo y luego ha ido llenando la junta de administradores con gente afín y leal a su persona.