El ‘número 19’ de nuestra publicación Los+Mejores Rock Magazine, todavía en formato de fanzine, lo sacamos en octubre de 1995. El ejemplar tenía tamaño de cuartilla y así Los+Mejores era algo fácil de llevar y manejar, una revista de bolsillo. La cubierta y contraportada las imprimíamos a color y las páginas interiores en blanco y negro.

En esta ocasión la imagen principal de portada la ocupó el cartel del festival de Donington (Inglaterra) que ese año no llevó la etiqueta de “Monsters of Rock” como se había hecho desde 1980. Los promotores habituales no estaban decididos a celebrar aquella edición y el grupo Metallica salió al rescate del evento, le puso el título de “Escape from the studio ’95” y se presentó como cabeza de cartel. 

También plasmamos en portada un título destacado que ponía “Reading” porque cubrimos de paso dicho festival británico dado que se celebró el mismo fin de semana.

En nuestra sección de maquetas o demos, llamada “L+M promesas”, nos ocupábamos de formaciones que daban sus primeros pasos, todavía no tenían disco alguno editado y movían su música con grabaciones en formato casete. En este número dedicamos espacio a las cintas de tres bandas que previamente nos habían enviado ya otros trabajos. Sí, los grupos no cesaban de currar por labrarse una carrera y repetían con los envíos a Los+Mejores.

Mare Crisium, desde Vélez-Málaga (Málaga), nos hizo llegar su segunda maqueta titulada “Último día”, de la que se encargó Jon Marin. Parece ser que la banda luego no tuvo fortuna y cambió su nombre a Nueva República Sonora (N.R.S), mutando también su estilo.

Drift fue un grupo inglés de la zona de Londres que nos envió su primera demo (“Animal feed”) y volvió a hacer lo mismo con la segunda, de la cual hizo la crítica José Mari M. Cebrián. La formación no tuvo más trayectoria, aunque luego surgieron otras con el mismo nombre por el mundo que nada tenían que ver.

Malos Tragos, un grupo de Barcelona, nos había mandado antes su primer disco, “De ninguna manera”. Tras éste, volvió al formato demo y de dicha casete también hizo la crítica José Mari M. Cebrián. Creemos que esta grabación fue una muestra para presentarla a medios y discográficas, y sus cinco temas acabaron formando parte de su segundo disco oficial, “Autosuficiencia denegada”, que lanzó Maldito Records. La banda sigue viva en nuestros días.