El guitarrista y encargado de las segundas voces Miguel Cartagena Zarco, el bajista y cantante Javier Almansa y el batería Rate Fernández López son los músicos que componen este power trio que el próximo mes de octubre publicará su primer disco: ‘Atropos’. Procedentes de la localidad alicantina de Orihuela, la formación basa su música en las enseñanzas e inspiración de referentes internacionales como Tool, Opeth, Enslaved o incluso Muse. El Rock como concepto genérico, el Metal desde los años 80 hasta su evolución actual y un fuerte componente Progresivo dan forma a su música.
En sus propias y promocionales palabras, Chemosphere “hace uso de diferentes planos de intensidad en las canciones, fusiona riffs de Metal Extremo con secciones melódicas que reflejan lo que todos llevamos dentro: diferentes emociones que se suceden unas a otras, cada una de ellas con su propia belleza”. En sus letras “se cuenta el final de todas las cosas que nos dan identidad: nuestra mente, nuestras emociones, la compañía de los que nos rodean, de la vida en sociedad… Todo aquello que nos hace humanos”.
Ya han dado a conocer sus dos primeros sencillos sobre un total de nueve composiciones: ‘Time won’t last’ y el posterior ‘The laws of war’, que es descrito por sus autores del siguiente modo: “habla sobre los horrores de la guerra, especialmente para los jóvenes, que funcionan como combustible para la barbarie. La canción es un viaje que parte desde el reclutamiento a través de la propaganda hasta llegar a la conclusión de que todo es una farsa, un juego carente de sentido en el que ellos son las víctimas, que mueren para beneficio de otros.
Es uno de los temas más progresivos y completos del próximo álbum. Se podría decir que es una muestra de todo lo que Chemosphere ofrece, ya que contiene desde partes acústicas hasta breakdowns, pasando por riffs de Heavy Metal y polirritmias. En la producción destaca la inclusión de un solo de clarinete en una de las secciones centrales de la canción, donde se describe de forma melancólica el mundo que está siendo destruido por la violencia de los seres humanos”.
Leo Cebrián Sanz