Heidi Shepherd, una de las cantantes del grupo Butcher Babies, dice que no se arrepiente de la época en que ella y la otra vocalista, Carla Harvey, llevaban los senos al aire tapando sus pezones con cinta negra. Comenta que fue un homenaje a Wendy O. Williams de Plasmatics, grupo que tenía una canción llamada «Butcher baby». (Ver vídeo abajo).

Este gesto, esta imagen, hizo por supuesto que el grupo ganase atención, mientras algunos seguidores del Metal criticaban esta pose porque, decían, era para vender, pura artimaña comercial, y otras personas las acusaban de aprovecharse de su condición de mujeres para ganar popularidad.

Heidi asegura que también iban así en la banda anterior a Butcher Babies que tuvieron: “No era algo nuevo para nosotras”. Y añade: “Creo que en Europa se entendió mejor que en EE. UU. ¿Nadie conoce a Wendy O Williams?, ¿los metaleros no saben quién es? No lamentamos nada de lo hecho. Hemos evolucionado, hemos pasado de ser aquellas niñas con cinta en los pezones gritando cosas odiosas ante el micro a unas mujeres con casi una década más de madurez, sabiendo lo que es la industria y, ahora, apoyando a movimientos en favor de las mujeres.”

Shepherd también insiste en que en ningún momento ofrecieron aquella imagen como una estrategia de ‘marketing’: “Porque de verdad nunca pensé que llegaríamos donde estamos ahora. Creamos Butcher Babies pensando en sólo pasar buenos ratos haciendo música propia y disfrutarla con los amigos en Sunset Strip.”

Su compañera, Carla Harvey, ya dijo antes: “Estábamos rindiendo un homenaje a una mujer del Metal que respetamos: Wendy O Williams. Nuestro espectáculo nunca tuvo algún tinte sexual.”

  • El tercer disco de estudio de BUTCHER BABIES, «Lilith», salió en octubre pasado.

Wendy O. Williams en 1980