Esto seguro que no lo encuentran en Spotify. Se trata de una de esas reediciones que aún legitiman la existencia del CD. De hecho, el disco compacto se está revelando como el formato perfecto para recuperar demos y grabaciones ocultas de la historia del Heavy Metal, en este caso patrio. Aftershock fue una banda que funcionó entre 1988 y 1991, siendo éste el tramo cronológico que titula la recopilación de todo su material grabado.

Las diez pistas que incluye esta antología del grupo vizcaíno de Ermua proceden de distintos momentos en la vida del grupo. Las cuatro primeras corresponden a su homónima maqueta de 1991 («Corta las venas», «Bestias de Venus», «Perdedora» y ‘Cross of fire’), mientras que los temas «Falsa verdad», «Jeckyl and Mr. Hyde’ y ‘Sentence of death’ fueron grabados en pleno local de ensayo con los recursos técnicos disponibles en ese momento.

Por su parte, ‘Shrapnel’ -uno de los nombres que la formación había adoptado antes de optar por la definitiva- y «Amigo de nadie» están condicionadas por las limitaciones de un simple dispositivo manual de grabación. La segunda es una pieza instrumental, ya que aún no disponía de letra. Finalmente, «Instinto animal» fue la canción que les llevó hasta los prestigiosos Lorentzo Records Studios, no en vano su destino era un disco recopilatorio de bandas de su localidad. Fueron profetas en su tierra, ya que ganaron el concurso Villa de Ermua en 1992.

«Aftershock 1988-1991» incluye la pertinente biografía en castellano e inglés, además de imágenes y fotografías que documentan la trayectoria de este quinteto de dos guitarras, por el que pasaron hasta siete músicos. De tres de ellos se detallan sus posteriores aventuras colectivas.