El pasado jueves 7 de noviembre se presentó en Madrid “El Festival de Invierno 2025”, que no es sino una edición más del ya popular Inverfest. El ciclo cultural madrileño que arranca el año en materia musical sigue creciendo en cada nueva edición y esta vez también habrá convocatorias locales en Zaragoza y Bilbao -Negusfest en su versión vasca-. Un total de 102 conciertos tendrán lugar en la capital y la recién llegada Fuenlabrada entre los próximos 9 de enero y 22 de febrero en salas de pequeño, mediano y gran aforo, es decir, desde un Siroco a un Wizink.
La rueda de prensa durante la que se hizo público su cartel tuvo lugar en el más emblemático de sus espacios, ese Teatro Circe Price donde nació y se desarrolló la idea. Dos de los responsables de Inverfest condujeron la gala, que tuvo como alicientes artísticos las actuaciones de la vocalista femenina La Bien Querida y el cantautor Pedro Guerra, quien interpretó dos canciones mientras se ayudaba de una tablet para leer las letras -chocante en un intérprete de su categoría y una cuestionable costumbre que se está extendiendo entre los cantantes de todo signo-.
El programa de recitales y conciertos de Inverfest resulta desde luego de lo más ecléctico y variado, pero en lo tocante al Rock la oferta se limita y centra en artistas y bandas clásicas como Coque Malla, Tarque & la Asociación del Riff, Rulo y la Contrabanda, Los Zigarros e incluso los independientes Standstill o los veteranos Surfin’ Bichos.
Otras propuestas más innovadoras pero igualmente interesantes son las de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba o Gorka Urbizu, el líder de los vascos Berri Txarrak. La música Rock en femenino está representada por la cada vez más atractiva presencia escénica de Nat Simons y las siempre estimulantes Bones of Minerva en su apertura para Viva Belgrado.
Flamenco, músicas de raíz, canción de autor, jazz y las llamadas “músicas urbanas” (sic) completan un programa muy inteligente, que tiene su particular “regalo sorpresa” en la experiencia musical que compartirán el director y el protagonista de la película “La estrella azul”. Recordemos que este largometraje versa sobre la figura del rockero aragonés Mauricio Aznar, del grupo Más Birras. Una guinda divertida será a buen seguro la de Adrià Salas, cantante de La Pegatina, con su propia música en solitario.
Leo Cebrián Sanz