Madrid– Sala But– 04.02.2017
Tete Novoa cumplió lo prometido hace unos días en la entrevista realizada para este portal: ofrecer al público madrileño un repertorio compensado entre los grandes éxitos del grupo y los temas de su último disco, ‘Vivir en el mal, morir en el bien’, un trabajo lleno de canciones que funcionan muy bien en directo, algunas de las cuales son candidatas a pervivir en los shows de Saratoga en los próximos años.
Es cierto que la banda madrileña jugaba en casa y que los asistentes llegaron a la sala de Tribunal con las pilas cargadas para disfrutar de un concierto exclusivo de dos horas de duración, pero no resulta fácil incluir la mayor parte de los nuevos temas, tratándose de una formación que este año cumplirá 25 años de historia. Muchos artistas utilizan las presentaciones de discos como excusa para organizar conciertos en las que importan mucho más los viejos éxitos que canciones nuevas, generalmente acogidas con frialdad por el público. Saratoga arriesgó y ganó impulsado por la intensa energía que transmite su cantante, Tete Novoa, uno de los frontman más completos que he visto en los últimos tiempos.
Y es que el cuarteto ofreció un concierto no sólo apto para los incondicionales, sino también para aficionados neutrales (es mi caso) que afrontamos el show con espíritu crítico. El veterano combo se apoya en unas estructuras propias del Heavy Metal más clásico, sin apenas innovaciones, y sabe aprovecharlas con maestría para ofrecer una inyección de adrenalina constante.
A la hiperactividad de su vocalista, hay que añadir la solidez en la percusión de Dani Pérez y la veteranía de los miembros fundadores, el bajista Niko del Hierro y el prestigioso guitarrista Jero Ramiro, el hijo pródigo que regresó a uno de sus proyectos bandera a finales de 2014. Niko aporta entusiasmo y energía en los coros, además de formar una base atronadora con la complicidad de Dani. Jero afrontó el concierto con mayor tranquilidad, pero transmitiendo una imagen de placidez, sin duda favorecida por el recibimiento de sus fieles y las condiciones de sonoridad y comodidad de la sala But.
Desde el inicio, la obra más reciente copó el protagonismo con temas como ‘Perseguido’ o ‘Volverá’. También brillaron el single, ‘Como el viento’ y ‘El vals de la rosa herida’, la contribución de Saratoga a la lucha contra la violencia de género. Y de los clásicos, qué decir: ‘No sufriré jamás por ti’,‘A morir’, ‘Si amaneciera’, o ‘Perro traidor’ son argumentos para impulsar a los fieles a participar en el espectáculo.
Gracias a su actual estado de forma, Saratoga dará mucho que hablar en la inminente gira que llevará al grupo por tierras mexicanas y estadounidenses.
Texto y Fotos: Javier del Valle.
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