El Thrash Metal es un invento maravilloso, que parecía que se iba a quedar acotado por la década que lo vio nacer, pero que desde hace treinta años renace y renace cual áve fenix de la música directa y acelerada. Los leoneses Töxik Waltz combaten el frío de su castellana tierra con una buena sopa de sacudidas de cabeza, sucia velocidad, ingesta de muchas cervezas y el siempre recomendable desfase y desgaste físico de un tipo tirándose desde el escenario para que sus colegas y unos voluntariosos desconocidos le sirvan de pista de aterrizaje.
Su primer disco se titula ‘Declassified’ y fue registrado en los estudios Biohazard, propiedad de Nathan Cifuentes, que fue quien se encargó de la grabación. También aportó un solo de guitarra en la canción ‘Thrash metal dictatorship’. El álbum está disponible desde el pasado 10 de septiembre como parte del catálogo del sello Eventhink Metal Records, aunque el grupo ha tenido el detalle de subirlo íntegro a You Tube para que cualquiera pueda escucharlo antes de comprar su copia física.
El quinteto está integrado por Txavas (voz), Víctor y César (guitarras), Alberto (bajo) y David (batería). Las canciones que presentan son las siguientes: una intro bautizada como ‘Abduction’ y títulos como la citada ‘Thrash metal dictatorship’, ‘Beyond the wall of sleep’, ‘Island of death’, ‘Politician’, ‘Srebrenica’, ‘Octogenarian violence’, ‘Loudmouth’ y ‘Thrashing like a maniac’ -con outro borracha incluida-. Practican un estilo muy «vieja escuela» y es fácil reconocer fuertes influencias del veloz Thrash americano de finales de los ochenta y principios de los años 90. A nosotros también nos suenan mucho al primer disco de Anthrax, aquel nunca suficientemente valorado ‘Fistful of metal’, de 1984.
Desde la portada al logotipo, las letras apocalípticas o su propia imagen, todo huele a cárcel o fábrica abandonada y vídeo rodado en su interior, al estilo de un ‘Over the wall’ o ‘Trial by fire’, ambos de Testament. Aunque autodefinen sus inspiraciones como «cualquier cosa entre el Rock Progresivo y el Brutal Death Metal», a la hora de la verdad se mueven entre las coordenadas que ellos mismos reconocen como más afines: Atrophy, Exodus, Pantera, Slayer, Metallica,
Nos fastidia tener que comentarlo, pero el hecho de coincidir con el nombre de dos formaciones de igual denominación -excluyendo la diéresis con la que adornan su primera vocal-, puede suponer un cierto hándicap a la hora de dar a conocer su música a escala internacional. Veremos cómo solucionan este problema, sobre todo en lo tocante a una banda alemana que encima practica el mismo tipo de Metal. Ya sabemos que el himno de Exodus resulta muy inspirador, pero…
Leo Cebrián Sanz