Imagen de portada: D.F.A. / La Víbora Lagarta / Miguel Oñate / AC-DC / Zarpa / Moebio.


AUTOMOTIVE – Las líneas que lees (Independiente/Lengua Armada)

Interesante propuesta. Once canciones conforman su disco de debut bajo la producción de Alberto Seara. Música contundente, personal y enérgica. Sin desmarcarse del Rock, se acercan a sonidos más alternativos, incluso a veces algo oscuros. Las letras nos narran inquietudes, ambiciones y vivencias propias.

Marco Vara

D.F.A. – Nuestra heces (Independiente)

Vuelta a la carga del grupo tarraconense que, contra viento y marea, implanta su revoltijo sonoro de Thrash, algo de Hardcore y mucho humor en sus letras conjugándolo con filosofía de grandes quilates de cómo está este mundo de locos en el que vivimos.

¿Recordáis a Natal Pride? El sonido de Danger Free Animals (D.F.A.) ha recogido el fruto del ‘no parar de hacer cambios de ritmo’ (hasta incluyendo algunos sintetizadores como en «Narcomonstruo»).

Las letras de «Bárbara-mente», «Monótono asesino» o «Umbilical» no te van a dejar indiferente, sobre todo porque te cuentan sus historias de una manera distinta, algo de agradecer cuando tratamos el asunto de los temas sociales. Todo con la personal voz de Óscar.

Suma que es un trío y tienen una fuerza increíble, que hacen algo muy personal… Estamos ante su mejor obra con una producción realmente conseguida. Lo tienen todo. Se siguen autogestionando y ya sólo queda defenderlo en directo; que lo hacen muy bien, te lo aseguro.

David Calderón

MIGUEL OÑATE – Muy personal (Independiente)

Mucho tiempo ha pasado desde que dejase atrás Asfalto y ahora nos presenta un trabajo con once temas propios y un videoclip. Tanto para el disco como para los directos, Miguel acompaña su magnífica y personal voz con su guitarra acústica y el resto del grupo es quien lleva el peso eléctrico. Para la grabación se ha rodeado de viejos amigos en forma de colaboraciones, entre las que destacan José Luis Jiménez y Lele Laína (Asfalto y Topo), Luis Rico (Caimanes) y Luis Cruz (Topo). Sin duda, harán las delicias de los nostálgicos. El título del álbum, “Muy personal”, no deja lugar a dudas: Canciones íntimas, sentidas, de vivencias propias donde en más de una ocasión nos podemos ver muchos reflejados.

Es del caso de “Señorita depresión” o “A medias”, dos de mis favoritas. Pero también hay otras con tintes más gamberros, de barra de bar, como “Esa camarera” o “El bar de Katy”. Repasando el disco se encuentran influencias de las grandes bandas del Rock, como no podía ser de otra manera, pero también de los grandes cantautores nacionales. Miguel se ha encargado tanto de las mezclas (con Pachi Escolano) como de la producción, además del diseño (junto a Luis Rico). Se hace patente el gran interés que tiene en que todo quede exactamente como lo tenía pensado. Cuanto menos, una apuesta que se sale de lo común, muy trabajada y recomendable.

Marco Vara

MOEBIO – Moebio (DFX Records)

Grupos y discos así son siempre bien recibidos, revitalizan el panorama musical y nos hacen mirar al futuro con optimismo.

Moebio navega entre las aguas del Rock más contemporáneo y las de la melancolía Gótica, ambos géneros compiten por una mayor influencia, pero, objetivamente, esta lucha acaba en tablas con lo que el claro ganador es el oyente, que obtiene como resultado unas canciones que destilan ecuánimemente pasión, energía, fuerza y sensibilidad. Buena parte de ‘culpa’ se la lleva Héctor Gerónimo, ya que su voz, además de encajar a la perfección en este tipo de música, tiene la personalidad suficiente para manejar con maestría el timón que aúna tanto eclecticismo.

Todo lo expuesto, más la gran producción y las colaboraciones (Joseph K, Belén Arjona, Jorge Escobedo, Antonio Bernardini), componen una montaña de versatilidad musical de las que verdaderamente merecen la pena.

Juan José Díez

PAUL SABU – Strange messiah (AOR Heaven)

La poderosa voz de Paul Sabu vuelve a registrar diez temas. Melodía y potentes coros bordeando la frontera entre el Hard y el AOR. Nada nuevo pero arregladito y, lo sé, estáis ahí, tiene su público.

J. M.

QUEENSRYCHE – Mindcrime at the Moore (Rhino/Warner)

Aquí están grabadas en directo (en dos cedés) ambas partes de “Operation mindcrime”. La primera, la clásica, sobra decir que es una obra maestra, pero, oye, están tan bien interpretadas y registradas las dos que hasta temas que me habían pasado desapercibidos cuando escuché la segunda en estudio (me pareció un disco espeso), me han gustado. Un aplauso para los de Seattle. Lo dice –escribe- alguien que no es amante de los plásticos en vivo.

Jon Marin

RUSH – Snakes & arrows (Atlantic)

Lo último de los canadienses, reyes del Progresivo. ¿Quién se atreve a discutir la calidad de sus discos, se hagan más o menos pesados?, ¿quién le tose a una banda que sólo en EE.UU. ha vendido más de veinticuatro millones de copias a lo largo de su carrera? No seré yo.

J. M.

SILVER DIRT – Sonic boom (Independiente)

Aquí tenemos a Silver Fist haciendo Heavy Metal y en Suiza tienen a Silver Dirt practicando Sleazy (guarro, como debe ser) pero sin dejar de mirar atrás (Zeppelin) y con detallitos de R&R a lo Rose Tattoo. Es su segundo CD y han teloneado a Brides Of Destruction y Gilby Clarke. ¡Funcionan!

J. M.

SILVER FIST – Tears of blood (Avispa)

Versión cantada en inglés del último disco de Silver y sus secuaces, “Lágrimas de sangre”. Como en los chistes, habrá que preguntar a un inglés, un alemán y un español cómo les suena. Para gustos, colores.

SOUL DOCTOR – Blood runs cold (Metal Heaven/Germusica)

Cuarto trabajo de la banda del cantante Tommy Heart (Fair Warning). Gustará a los amantes del Hard Rock melódico o del Hard Rock a secas, al estilo de Thunder por ejemplo. Hay un tema escrito por Joe Lynn Turner y Glenn Hughes.

J. M.

STIGIA – Espiral de sueños (Independiente)

Demo de este grupo cordobés que nos presenta cinco temas en castellano que cabalgan entre el Heavy más clásico y el Thrash Metal, aunque sin embargo dejan entrever algunos toques más modernos que nos pueden recordar a grupos de más nueva hornada como System Of A Down. Como más reseñable, la labor de los guitarristas, que sin ser virtuosos cumplen muy bien el cometido. Una digna tarjeta de visita para futuros trabajos.

Jorge Grande

TURBONEGRO – Retox (Edel/Warner)

Nuevo CD de los geniales refriteros noruegos. Me resulta ameno de escuchar pero ya son varios los seguidores acérrimos de la banda que –según me comentan- no acaban de aceptarlo como bueno, así que… tú mismo, paso de mojarme.

J. M.

W.A.S.P. – Dominator (Demolition/Avispa)

Desconozco qué doctor le ha cambiado la medicación a Blackie Lawless (uno de los músicos más antipáticos que he entrevistado) pero, ¡coño!, después de mucho tiempo ha vuelto a fabricar un buen disco… con nombre de súper héroe malvado.

Jon Marin

ZARPAEl yunque contra el martillo (Karthago)

De nuevo ¡vaya obra maestra del Heavy Metal! Lástima que en los ochenta las discográficas no dieran la misma importancia a Valencia que a Madrid, ya que otro gallo le hubiera cantando a Vicente Feijoo y su incombustibles compañeros.

Centrándonos en su nuevo trabajo, cada tema está tratado como auténticos conocedores de un estilo que llevan en la sangre desde hace mucho tiempo y pocos son capaces de hacer para que las canciones te llenen de la misma forma. Además con temas muy actuales como «Sin piedad», o «Fantasía». «El yunque contra el martillo» es un himno para que nunca olvidemos que somos hijos (con perdón de nuestros padres) del Heavy Metal. Para colofón, «Los defensores del rock», o sea, tú, yo, nuestra gente; nos pondrá la carne de gallina. Como bonus tracks: «Vuelo siniestrado», «Bienvenido al show del hombre mono» y «Luchadores de la paz» en un redondo que consta de dieciocho canciones.

Una producción acorde con el nivel del trabajo, tratado exquisitamente, consiguiendo el sonido de los ochenta con la técnica del año 2007. Señores, sin pensarlo y casi acabando el año, de lo mejorcito que ha salido en nuestro país en 2007.

David Calderón

LA VÍBORA LAGARTALa potencia de la inercia (Universal/Elisong/viboralagarta.com)

Con este cuarto trabajo la banda se asienta definitivamente tras el cambio de formación, ya que Luis Fabián, creador y compositor de todos los temas, es el único que permanece de la etapa anterior.

Mestizaje y fusión en estado puro es lo que vamos a poder encontrar en esta ocasión. Canciones muy diversas y para todos los gustos. Haciendo un recorrido por los once temas del disco (ocho nuevos y tres adaptaciones de su anterior etapa), ya en el primero, “Desenamorá”, nos damos cuenta de lo ‘bailable’ que es gracias a las magníficas percusiones y sus cambios de ritmo. Siguiendo con este estilo, nos topamos con “Loka” o “Que corra el aire”, que deja ver las genialidades de las guitarras, o el comienzo de “Mundo de cera” que luego pasa a ritmos frenéticos. El Rock más tradicional tiene su espacio en “Deshaciendo inviernos”, “Buscavidas” o en “Que no”, aderezado con unos teclados protagonistas. Incluso nos topamos con ritmos cercanos al Ska en “Nunka nunkita”. Pero los temas son tan variopintos que también hay hueco para la calma de “El jardín”. Todo esto, enlazado a unas letras sin concesiones y en ocasiones poéticas, consigue el perfecto equilibrio para un trabajo sobresaliente. Desde luego es una propuesta muy personal, llena de matices imposibles de describir, que merece la pena pararse a escuchar con atención. Además cuenta con el aliciente de una presentación en formato digipack con un libreto muy original.

Marco Vara

LA HISTORIA DE AC/DC – Autora: Susan Masino (Ma non troppo/Ed. Robinbook)

¿Quién era Rosie, la del tema “Whole lotta Rosie”? ¿Cómo creían los mismos músicos que iba a ser la portada de “Highway to hell” hasta pocas fechas antes de su salida? Las respuestas a estas preguntas y más te serán desveladas en la biografía que tratamos de la formación de origen escocés/ australiano, con un fallo en la portada de la edición española al añadir el subtítulo: “La banda de Heavy Metal más grande de todos los tiempos”. Todos sabemos que AC/DC no es sinónimo de Heavy Metal.

La escritora es Susan Masino, una periodista que tuvo la gran suerte de conocer al grupo personalmente la primera vez que tocó en EE.UU., cuando era allí menos conocido que ahora María del Monte en Inglaterra. (Entonces, Susan acudía a cubrir los conciertos simplemente por el regalo de un par de pases; esto me recuerda a algo). Uniendo las vivencias personales de aquel gran día, y de las posteriores visitas de AC/DC a Yanquilandia, a un esforzado trabajo recabando datos (aunque podría haber investigado más ciertos hechos como la muerte de Bon Scott), ha construido un libro bastante ameno, en el que –tranquilos- ni siquiera faltan las menciones a su actuación en Aplauso (TVE), la calle de Leganés o los triunfales tres días en Las Ventas. Lástima que los hermanos Young sigan sin colaborar para poner la etiqueta de ‘oficial’ a un libro como éste o que la autora no haya querido entrar más en la parcela de las drogas y el alcohol. Se nota que los ama, que es fan acérrima. ¿Seguro que nunca se acostó con alguno de ellos?

Jon Marin