EXTREMÚSIKA

LUGAR: Recinto Hípico-Ferial
CIUDAD: Cáceres
FECHA: 12, 13 y 14 de abril de 2007

Exitazo rotundo para esta edición de 2007 que, según cifras oficiales de la organización, congregó a 68.000 asistentes en total (que no personas diferentes): 12.000 el jueves, 25.000 el viernes y 31.000 estimadas en la jornada de sábado, según la venta de entradas. Con esas cifras estadísticas nos damos cuenta que el “Festival del Oeste” ha batido un nuevo record y se coloca por sí mismo entre los más grandes del panorama estatal. Todo ello nos hace felicitar a su buena organización, que no se ha dormido en los laureles y ha trabajado muy duro para conseguir hacer realidad un sueño, poner el nombre de la ciudad de Cáceres dentro del circuito rockero español con letra mayúscula. La gran variedad de estilos que aglutina el festival ha sido un enorme empujón para ayudarle a crecer, pero su calidad también se demuestra con la zona de acampada mejor organizada y acondicionada, mayor número de baños, duchas y otros servicios que en cualquiera de los festis de este tipo, así como en la seguridad y el control en los accesos al recinto.

Pero no todo es de color de rosa, cabría reprochar alguna cosa importante de la cual los organizadores de estos eventos deberían tomar buena nota. Con los grandes presupuestos que conllevan los macro-festivales se podría destinar una inversión mayor a cuidar y ofrecer un mejor sonido. Al fin y al cabo es lo más importante, musicalmente hablando. Otro aspecto relevante es la venta de entradas para un solo día. La gente que trabaja los viernes y sólo puede ir el sábado tiene que pagar el abono completo para poder ver únicamente un tercio de las actuaciones, es una pena (o putada, como prefieras llamarlo). Con todo y con eso hemos disfrutado un montón y más con todos los conciertos de los dos grandes escenarios, paseando por el mercado medieval, viendo la gran novedad con los duelos de covers, etc. En nuestra opinión, ha merecido la pena y por eso ahora pasamos a desgranarlo un poco día por día.

 

Jueves.- La primera jornada arrancaba la tarde del jueves en el escenario cubierto Amstel, anexo al recinto hípico cacereño, con un cartel más flojito y con menor cantidad de grupos que los días posteriores. Parafernalia y Ázido Sulfúrico fueron los primeros grupos en pasar por él, los primeros como ganadores del concurso de demos celebrado por Cadena 100 y los segundos como dignos representantes del Rock urbano extremeño. Nos fue imposible ver a ambas bandas debido a otras obligaciones que no vienen a cuento y entramos justo cuando Antisocial pisaban escena, grupo en el cual milita Dieguillo, ex Extremoduro y ex Cicatriz. Aires punkarras y un directo compacto para una formación que presentó los temas de su reciente disco. Tras ellos los aflamencados Calaña, compañeros de sello discográfico de los anteriores y que ofrecen un estilo totalmente diferente, muy mestizado, pero también atractivo. Les siguieron Mas, cuarteto barcelonés de Rock, y Amenoskuarto, joven banda procedente de Coria, con más camino por delante que por detrás.

Con los sevillanos Gérmenes se empezó a ver un incremento notable de público, su Punk-Rock engancha bastante y además era una de las últimas ocasiones para verles en directo, pues se separan próximamente. Uzzhuaïa demostraron su empeño y completaron una actuación muy electrizante y metálica digna de reseñar. Hamlet comenzaron con ganas y repasaron su antigua discografía con éxito, donde no pudieron faltar clásicos como “J.F.” o “Irracional”. Posteriormente otros madrileños, Def Con Dos, tampoco defraudaron al respetable, había ganas de verlos por Extremadura y el público se volcó con ellos. Desde Córdoba habían llegado Medina Azahara para currarse un directo de calidad y extasiar al público del primer día de festival, y lo consiguieron. Para concluir la fiesta de la noche estaban The Bon Scott Band haciendo versiones de AC/DC que conectaron con el público con una facilidad pasmosa y dejando un buen sabor de boca a la espera de los platos fuertes del día siguiente.

 

Viernes.- Para el segundo día había un cartel bastante interesante que englobaba y ponía de manifiesto las numerosas tendencias o estilos que se congregaron en Cáceres. Abrieron puntualmente a mediodía Fügu, desde Sevilla, que con su Funky cañero intentaron desperezar a la gente allí presente. Tras ellos unos locales, Los Jacobos, ofreciendo Punk-Rock fresquito, irónico, vacilón y sacando la sonrisa fácil al personal, al cual costaba mucho animar a esas horas. Después otros de la tierra, Maggot Brain, haciendo buen Hard-Rock y regalándonos un pedazo de versión del “Ace of spades” de los legendarios Motörhead. Ars Amandi y su dulzaina llegaron para poner un tono más folclórico al espectáculo del Recinto hípico, que poco a poco iba tomando otro color con la llegada de público desde todos los rincones del Estado.

La Pulquería salieron a darlo todo con un calor que apretaba bastante, pero no fue excusa para que el tequila y el Ska corrieran por todo el escenario mientras se veían los primeros pogos entre la gente y bastante movimiento en todo el Ferial. A partir de Kaótiko se registraba una entrada con muchos miles de asistentes, el sonido fue mejorando y se respiraba un ambiente de gran festival. Los de Agurain están teniendo buena acogida allá donde van, divirtiendo y dejando alto el listón punkrockero. Continuaba el buen Punk con otra banda de las que están dando con garantías el relevo generacional, los Segismundo Toxicómano, desde Vitoria. La gente disfrutó de lo lindo con el merecido repaso a sus obras de estudio. Tras éstos nos sorprendía la trágica noticia de la muerte del padre de Miguel, bajista de Sínkope. El grupo comentó tristemente el hecho e hizo (sin él) un set de cinco temas en acústico. Fue un momento muy emotivo ya que jugaban en casa, desde aquí damos el pésame a toda la familia y amigos.

El festi merecía seguir y por ello vino la actuación de la Mala Rodríguez. Un poco de Hip Hop no viene mal de vez en cuando, sirviéndonos para reflexionar, reivindicar, recapacitar, evadirnos y pensar que la vida sigue y hay que tirar siempre hacia delante. La gente de El Bicho comenzó con fuerza a animar a todo el mundo con su música y sus piruetas, pudiendo alargar un poquito su show y sin quejas por parte de nadie. La lluvia amenazaba, pero todo se quedó en una falsa alarma. Los Suaves eran los encargados de mantener el ritmo del festival, con un Yosi haciendo de las suyas y con mucha gente moviéndose entre las primeras filas. Después llegó el loco de Albert Plá, con un atuendo indescriptible y metiéndose al público en el bolsillo desde la primera canción. Peculiar personaje éste. Caía la noche para recibir a varias bandas de la vieja guardia. Primero Ilegales, que demostraron estar en forma, soberbios, clavando las canciones. Ser buenos músicos no está reñido con las irreverencias. Después los gallegos Siniestro Total, con muchas tablas, otros incombustibles del Rock que han marcado con sus canciones a varias generaciones.

Boikot pelearon hasta el final con un recinto hasta la bandera, con una sección de vientos que nunca habíamos visto en sus conciertos. Buena nota para ellos. Llegábamos así al punto más Heavy del Extremúsika con Blind Guardian a la cabeza. Los alemanes hicieron una selección de sus temas más potentes que sólo sus auténticos fans coreaban frase a frase sin desperdicio. Más tarde comprobábamos el regreso de Muro, que tras arreglar algún problemilla de sonido solventaron la papeleta de forma brillante y convirtieron en algo histórico su presencia en el 20 aniversario de la creación de la banda. El Último Ke Zierre saltaban al escenario con mucha gente esperándoles, aunque ya un poco cansados del duro día. No defraudaron a nadie y metieron su tralla entre canciones de amor y desamor como sólo ellos saben hacer. Cerrando el viernes estaban Canteca de Macao, con sus ritmos tamboriles y de fusión de estilos para llevarnos a la cama calentitos y con ganas de más.

Una de las grandes novedades para esta edición del Extremúsika era la inclusión de un escenario para bandas de versiones o covers (el mismo que el jueves acogió todas las actuaciones). Desde primera hora de la tarde del viernes vimos a grupos muy guapos, como Pal Keli, gente de O’Funk’illo con un cantante nuevo que hicieron un concierto intenso y muy acertado ante muchísima gente. Más tarde el DJ de MareaRock continuó amenizándonos la tarde hasta que subieron Los Parpel y nos deleitaron con las versiones típicas de los maestros Deep Purple. Micromachine hizo lo propio con Rage Against The Machine, salvando las distancias pero dejando contento al personal. Después vinieron de Madrid No Somos Nada, banda de versiones de La Polla Records. Son gente que ha militado en Doble Gota, Sugarless o Salida Nula y se lo montan de lujo, congregaron a varios miles de personas e hicieron las delicias para los nostálgicos del Punk. The Sex Pistols Experience no hace falta que digamos a quien versionan, debemos decir que son un calco y sirven para hacerse una idea de lo que da de sí el Punk inglés del 77. Como colofón vimos a La Leñera, a más de uno se le saltaban las lágrimas con las míticas canciones de Leño, bien trabajadas y sonando como antaño.

 

Sábado.- El tercer y último día del Extremúsika amanecía con la resaca lógica del día anterior, que nos duró hasta bien entrada la tarde. Comenzamos ahora con lo que aconteció en el escenario Amstel de covers. Hacia las siete de la tarde abrieron Metalmanía haciendo versiones de Metallica y contando con algún recurso pirotécnico y colaboraciones femeninas para hacer temas como “Nothing else matters”. Después pasaron por allí otras formaciones como Sábado Negro, recuperando el espíritu de los Black SabbAth, o La Pasma, para los fanáticos de Police. Los que se llevaron el gato al agua fueron Momo, la reencarnación de Freddie Mercury y los Queen estuvieron de sobresaliente con sus versiones. De AC/NE y Kissexy no podemos decir mucho, pues nos pillaron viendo las actuaciones de los escenarios principales, pero según los rumores de la gente estuvieron muy acertados y con muchos curiosos para verlos en las primeras filas.

Los escenarios grandes comenzaban sin dar respiro a las 12 del mediodía con el bolo de Stafas. Michel Molinera (ex Canallas) y los suyos eran los encargados de despertar a la gente con el genuino Rock urbano que les caracteriza. Luego era el turno para varias bandas de corte más Heavy. Stravaganzza dieron la cara de buena fe, sonando contundentes y con un Leo al frente como auténtico frontman. Silver Fist también rayaron a gran nivel, sabiendo todos que no son horas para este tipo de conciertos, pero es lo que toca en festivales con tantos grupos. Skizoo se dedicaron a presentar los cortes de su nueva obra. Tras ellos empezaba el público más Punk a rellenar el recinto hípico para recibir a los asturianos Fe de Ratas. Salieron disfrazados de presos de Guantánamo en los primeros temas. Fue un concierto con muchas ganas, divertido y sin dejar de lado la reivindicación (se podían observar un montón de banderas republicanas).

Después era el turno para una de las bandas más esperadas, Piperrak, que se han vuelto a juntar tras un parón de casi una década. Eran las cuatro de la tarde y hacía un sol de justicia, pero fue una de las actuaciones que más público atrajo, sin duda alguna, y no defraudó a nadie. Gran cantidad de recuerdos de juventud nos traen todas sus canciones, no hace falta ser Punk para corear temas como “Kualkier día”. Difícil actuar detrás de ellos, ese boleto le tocó a Dr. Sapo. Los de La Alcarria sorprendieron a más de uno con los temas que formarán parte de su segunda obra, que verá la luz en breve. Luego vino el cantautor Quique González ante un gran ambiente pero incomprendido por gran cantidad de público. Fue un show tranquilo y dejándose en el tintero algunos de sus cortes más moviditos. Los Burning llegaron después con sus himnos legendarios, realizando un conciertazo en un gran festival, donde no se prodigan mucho. Calidad musical desde La Elipa. Cambio radical de estilo para seguir con La Excepción que, como ellos se autodefinen, son “gitanos, hiphoperos y barriobajeros”. Cultura de la calle verso tras verso es lo que nos ofrecieron estos raperos carabancheleros.

Más tarde se dio paso a una de las grandes bandas de mestizaje del país, Macaco, encargados de poner patas arriba el hípico cacereño. Sus músicas del mundo se funden en un Reggae electrónico que hace moverse a todo el que lo escucha. A eso de las 21:30, ya sin sol, la mejor hora fue para uno de la escudería de A. Vallekas, Albertucho. Fue una actuación muy animada que, salvando algún fallo de sonido, discurrió con normalidad y con alguna que otra colaboración. Bien trabajado, Alberto. Seguidamente llegaban Los Inconscientes o La Inconsciencia de Uoho. Mucha responsabilidad por ser un grupo de reciente creación, pero todos sabemos bien de dónde vienen (Platero, ‘Extremo’) y cómo podían ganarse al público. Con la ayuda de Manolo Chinato sonaron temas como “El roce de tu cuerpo” o “Ama y ensancha el alma”, así fue todo más fácil.

Rosendo es otra leyenda viva que tiene cuerda para rato, con nuevo disco bajo el brazo abrió con el carismático “Agradecido”. Los temas más clásicos fueron recibidos por todo el público como agua de mayo y bailados por todos los viejos camaradas del lugar. El ‘buen rollito’ se agolpaba en el recinto para bailar y botar con Los Delinqüentes. Un gran sector de los asistentes optaba por sus ritmos pegadizos y rumbas, poniéndole una sonrisa a la vida y olvidándose de los problemas. Otro momento muy esperado llegaba cuando se subieron a escena Toy Dolls. Se trató de una actuación corta pero intensa, un espectáculo en toda regla el que montan estos tres viejos Punks ingleses. Diversión, ingenio y mucha marcha en todos sus temas. Después vino la profesionalidad de los italianos Banda Bassotti; el Ska, la lucha y la fiesta inundaron todo el aforo. Además nos deleitaron con una versión de Kortatu, donde se vivió un pogo brutal, “Zu atrapatu arte”. Rematando esta edición de 2007 estaban Los Chichos, que pusieron la nota pachanguera, alegre y rumbera, llevándose las mejores y más grandes ovaciones. Genuinos, simpáticos, recibiendo el calor del que no es su público, pero con sentimiento en piezas como “El vaquilla”, “Quiero ser libre” o “Son ilusiones”. Para recordar durante mucho tiempo…

 

Todo esto y más aconteció ese fin de semana en Cáceres, en un Extremúsika que se ha hecho adulto en el panorama festivalero. Dos grandes escenarios paralelos, non-stop, es la fórmula que tiene para recoger muchos estilos y mucha gente. Infinidad de grupos, pero buena organización. Resultado asegurado, éxito. Nos vemos en el siguiente seguro.

David Carabias y Marco Vara
Foto: David Carabias

 


 

VÍKTIMAS DEL JÄUS
Fiesta+Concierto de Los+Mejores

LUGAR: Jimmy Jazz
CIUDAD: Madrid
FECHA: 26 de abril de 2007

A las 9:30 h. tendría que haber dado comienzo el concierto de Tremendos pero, por motivos que no vienen al caso, el grupo no pudo saltar al escenario, así que los ex componentes de Matando Gratix y Doble Gota y Sergio, de Salida Nula, fueron los encargados de ponerle Rock a la noche pasadas las 10:30. Abrieron con “Airam” (María al revés), uno de los temas más conocidos, y con “Va por vosotros” metiéndose al público desde la primera nota. A lo largo de las quince canciones descargaron su característico y reivindicativo Punk-Jäus tocando sus temas más carismáticos como “Niña mona”, “No vale la pena” o “¡Toma!” y dejaron caer una versión de la canción “Enamorado de la moda juvenil” de Radio Futura que nos dejó con la boca abierta. Con bis incluido y agradecido por un pub ‘Jimmy’ con aforo completo, cerraron con el Ska de “Por ké te vas” y se garantizaron el fin de fiesta con “La feliz”. Víktimas del Jäus, después de haberse adjudicado el concurso de maquetas de las fiestas del PCE 2006, parece que siguen dando pequeños pasos, pero muy firmes, que seguro les llevarán muy lejos.

Marco Vara