Bruce Salinas, o más bien Bruce Grinn como seudónimo artístico, es el responsable de un debut discográfico titulado ‘Fustian Times’. Alguien lo ha definido como «Rock emocional mezclado con Folk intimista» y a ello nos agarramos para introducirnos en las ocho canciones de su estreno como cantautor eléctrico, en el que también hay mucho de un matizado Country-Rock.

‘Fustian…’ fue publicado a mediados del pasado año y entre otras cosas es un reflejo la mezcla hispano-británica del autor. Natural de A Guarda, en Pontevedra, Bruce (40) vivió desde 1994 en el Reino Unido, el país natal de su madre. Su etapa en el Reino Unido le llevó a formar parte de varias bandas en las ciudades de Southampton, Exeter y Brighton, siempre como guitarrista. El músico regresó a nuestro país en 2011 y no tardó en integrarse en el dúo The Loopholes, cuya música basada en guitarra acústica y batería vio la luz en varias ediciones discográficas.

Este inicio en las labores de composición e interpretación vocal marcó el camino a seguir para Bruce, que adoptó su actual encarnación para endurecer su sonido y autoeditar este ‘Fustian Times’ que hoy nos ocupa. En él ha cantado y tocado el bajo y las guitarras solista, rítmica y acústica. A su lado estuvo Miguel de la Peña, quien también grabó algunas partes con los mismos instrumentos. La batería fue obra de Víctor Fuggetto, Gustavo Domínguez se encargó del piano y el órgano Hammond y Tania Rodríguez Braga incorporó las líneas vocales femeninas en los coros y dobles voces.

Grinn describe así la gestación de este primer hijo discográfico, del que puede sentirse bien orgulloso:

«Era hora de avanzar hacia proyectos más ambiciosos. La idea de hacer un disco de banda completa había estado rondando mi cabeza desde mucho antes de comenzar The Loopholes. Simplemente no era el momento adecuado. Parecía especialmente difícil y desafiante porque no tenía una banda para preproducir y grabar las canciones. La idea inicial era volver a Inglaterra a grabar este disco y hacerlo arropado por músicos de varios grupos (Ergo Schmidt, The Yes Men, etc.), pero el proceso se hizo muy complicado y tuve que abandonar la idea.

Meses después Miguel (Baixo Miño Studios) se unió al proyecto y la pelota comenzó a rodar. Preparamos tantas canciones como pudimos en el poco tiempo que tuvimos. Desafortunadamente, las limitaciones de tiempo, dinero y recursos limitaron la cantidad de ellas que podríamos grabar. La verdad es que fue todo muy poco ortodoxo. Muchos arreglos se hicieron improvisando sobre la marcha. Diría que el treinta por ciento del disco nació en el estudio. Algunos temas cambiaron tanto que tuve que reescribir las letras y melodías vocales casi al completo en una semana. Fue complejo, porque al no tener banda, no podían ser ensayadas antes de ser grabadas.

El día a día se convirtió en la sala de ensayo para mí. Mirando hacia atrás ahora, parece casi irreal que haya grabado este disco. Hace doce meses estaba caminando hacia el estudio con una guitarra acústica bajo el brazo y un viejo cuaderno con letras garabateadas. Pero lo sacamos adelante. Durante todo el proceso sentí que el viento soplaba en la dirección correcta. Nos ayudó a superar todas las dificultades que encontramos en el camino, que no fueron pocas.

‘Fustian Fumes’ se grabó finalmente  durante la primavera de 2017 en Baixo Miño Studios gracias a la participación y colaboración de personas que vieron el valor de lo que estaba tratando de construir. Creo que ‘Fustian…’ marcó el comienzo de un largo camino. A día de hoy no hay planes de seguir el lanzamiento del disco con una gira. Es triste decirlo, pero es probable que siga siendo un disco de estudio en el futuro próximo».

Luces y sombras de una experiencia personal y valiente, que aplaudimos conscientes del valor que siempre tiene una iniciativa individual como la suya.

Leo Cebrián Sanz