La editorial Jawbone Press ha anunciado que en noviembre de este año se editará el libro «Turn it up! My time making hit records in the glory days of Rock music», nuevo libro del famoso productor musical Tom Werman.

Werman creció en las afueras de Boston (EE. UU.) y se encandiló desde muy joven con la música de Elvis Presley y luego la de George Harrison. En 1970 comenzó a trabajar en la discográfica CBS como buscatalentos en Epic Records. Aconsejó que ficharan a grupos enormes como Reo Speedwagon, Boston, Ted Nugent, Cheap Trick, KISS, Rush o Lynyrd Skynyrd, pero sus jefes tenían la mira puesta en otras cosas. Cuando acabó siendo productor independiente, hizo su trabajo en discos como «Shout at the devil» de Mötley Crüe, “Stay hungry” de Twisted Sister, “Live with Jan Hammer” de Jeff Beck y “Open up and say… ahh!” de Poison. En total, ha producido veintitrés obras discográficas que suman más de 52 000 000 de copias vendidas. En 2001 se retiró de la producción.

Cuenta Tom que “el libro es un relato honesto y atractivo sobre cómo surgieron algunos de los discos más queridos de los años setenta y ochenta”. La editorial comenta que “es una obra imprescindible para cualquiera interesado en los días de gloria del rock y el metal”.

Bun E. Carlos de Cheap Trick ha dicho: «Como productor de algunos de nuestros discos más importantes, ‘Dream police’ o ‘Heaven tonight’, Tom ayudó a llevar nuestras canciones del blanco y negro a deslumbrantes colores».

Rikki Rockett de Poison ha contado la siguiente anécdota: «A finales de 1987 o principios de 1988, alguien preguntó a nuestro bajista, Bobby Dall, quién iba a producir el siguiente disco, y él dijo ‘¡Tom Producer!’ (Tom Productor), en lugar de Tom Werman. Todos nos reímos, pero luego nos dimos cuenta de que Tom Werman sí era “el productor”, era una máquina de conseguir discos de platino para las bandas de rock«.

Doc McGhee, representante de Motley Crue, Bon Jovi, KISS… ha dado también su opinión: «A pesar de toda la locura que supuso trabajar con Motley Crue en los años ochenta, había una cosa en la que podía confiar, y era que Tom y la banda iban a hacer buena música para el siguiente disco, sí o sí».

Tom Werman estuvo implicado en el trabajo de temas que fueron éxitos masivos como «Every rose has its thorn» y «Nothin’ but a good time» de Poison, «We’re not gonna take it» y «I wanna rock» de Twisted Sister, «Girls, girls, girls» de Motley Crue o «Surrender» de Cheap Trick, entre muchos otros.

Información recopilada y redactada por Jon Marin