A día y medio de que se conociera la muerte de Pepe Barranco, prácticamente ningún medio nacional se ha hecho eco del deceso de una de las figuras claves para la introducción del Rock en España. El cantante y guitarrista falleció el martes 13 de diciembre, apenas unas horas antes de la presentación de “Todos juntos por el Rock and Roll”, un CD y DVD que pone en valor a todos aquellos Pioneros Madrileños del Pop que dan vida a la asociación PMP. Él mismo da inicio y final al repertorio del compilado, un círculo que se cierra y el reconocimiento debido a quien se atrevió a romper con la inercia de la música juvenil española, que por aquel entonces pecaba de rígida y antigua.

Barranco era un superviviente nato del primer Rock and Roll de finales de los años 50, cuando muchos le vieron como la encarnación local de Elvis Presley. Basta contemplar las imágenes de la película “Pasa la tuna” para comprobar cómo se las gastaba este rocker de vocación, fascinado por la nueva música que llegaba desde allende los mares. Entre 1960 y 1964 Los Estudiantes publicaron tres EPs. Fueron apenas doce canciones, pero sirvieron para que un aire artístico revolucionario entrara en los teatros de los colegios religiosos más proclives a la manga ancha y en las casas de la burguesía madrileña menos rígida, que saludaba así a la que luego sería la generación ye-yé.

Su primer conjunto, Los Estudiantes, fue como nuestra propia versión de los mexicanos Teen Tops, con versiones como “La bamba” o temas propios de ese urgente y rápido Rock and Roll pensado para el baile frenético. Más tarde llegaría su incorporación a Los Pekenikes o Los Flecos, aunque durante casi dos décadas Pepe desapareció del mapa artístico hasta su regreso a mediados de los años 80. Cuando volvió lo hizo tributando a su adorado Elvis, a quien dedicó todo un álbum editado por Cocodrilo Records en 1989.

Durante sus últimos años Pepe Barranco ha sido un artista de revival puro, pero se mantenía en una forma estupenda pese a sus más de 80 años. Recibió el Premio Pionero de sus compañeros y compañeras de PMP y formó parte de aquella tercera gala de 2016, cuando demostró que aún latía la electricidad en su corazón de músico veterano. Ese día actuó junto a su hijo, el director de cine Javier Elorrieta, como parte del grupo Raiders.

Hay quien dice que Pepe fue también quien primero interpretó Country en nuestro país, puesto que su amor por la música de raíces norteamericanas y su óptimo acento en inglés le animaban con frecuencia a coquetear con este tipo de sonidos en sus esporádicas actuaciones en salas.

Leo Cebrián Sanz