El pasado martes 28 de noviembre se celebró en la madrileña sala Galileo Galilei un concierto muy especial en homenaje a Pepe Barranco, el fallecido cantante y guitarrista que está considerado como precursor y pionero absoluto del Rock español. El evento fue organizado por la pareja de Barranco, Amalia Blanch, quien reunió a un buen número de músicos vinculados a la carrera del líder y alma mater del conjunto Los Estudiantes.

En el equipo responsable de la coordinación del tributo también estuvieron Sonia Cruz y el guitarrista Jeff Espinoza, mientras que de la presentación se encargaron el hombre de radio Paco Madrid y Sonia Elvira. Las entradas de esta velada se agotaron días antes y toda la recaudación fue a beneficio de ADISLI (Asociación para la Atención de Personas con Discapacidad Intelectual Ligera e Inteligencia Límite).

La primera parte del espectáculo comenzó con la interpretación de “Ojos verdes” a cargo de Araceli Lavado, a quien siguió Helen de Quiroga con la eterna “Mediterráneo” de Joan Manuel Serrat. Amalia Blanch se animó a cantar “Cuatro estrofas” y José María Guzmán (CRAG, Cadillac…) hizo lo propio en “Hay un amigo en mí”. Este desfile constante de individualidades con grupo permanente de apoyo prosiguió con Sergio Raúl y el inmortal ‘It’s now or never’ popularizado por Elvis Presley, el artista referencial de ese Elvis patrio que fue Pepe. En la misma línea, Kike Jambalaya puso a bailar al respetable con el clásico ‘Blue suede shoes’.

El siguiente segmento arrancó con Marta García Calderat y su adaptación de ‘Addicted to love’, que fue la antesala de Ramón Arroyo, guitarrista de Los Secretos, quien dio una nueva vida a ‘Standing on the rock’. Espinoza puso el contrapunto con ‘Sweet home Chicago’, Ana Elvira nos enseñó lo que es ‘Beatiful’ y Sonia Cruz proclamó que ‘I love you cause I want to’.    

Tras la presentación de ADISLI y un vídeo especialmente realizado para la ocasión, la segunda mitad del show dio paso a la parte más colaborativa y estelar de los artistas invitados. El medley de dos temas de Los Brincos -“Flamenco” y “Mejor”- hizo que compartieran el escenario dos grandes como Lele Laina (Topo) y Miguel Morales, titular del gran grupo de los años 60. A continuación la instrumental “Hilo de seda” de Los Pekenikes fue el prólogo de unos desatados 80 años de Micky, quien se declaró “Harto”, uno de los temas más populares de sus inseparables y actuales Colosos del Ritmo.

La emoción fue subiendo poco a poco, aunque por desgracia un problema de voz impidió estar presente a Miguel Ríos, quien se había preparado para el acontecimiento sendos “momentazos” de “Popotitos” y “Santa Lucía”. Esta escalada rítmica y rocanrolera tomó velocidad de crucero con el fragmento encargado a Raiders, la banda de versiones que dio un aire nuevo a ‘Ain’t no sunshine’, ‘Highway to hell’, ‘Suspicious mind’ -nuevamente Elvis- y ‘Mistery man’. Defendiendo estos números estuvieron Laura More (voz), David Gwynn (guitarra), Javier Elorrieta (bajo) y Carlos Revenga (batería).

Ya en el tramo final hubo tiempo para que Extudiantes -antiguos integrantes de Los Estudiantes- diera un repaso a ‘Suzie Q’, ‘Lay down Sally’, un ‘Cry’ compartido con Amalia Blanch y un ‘Peaceful easy feeling’ al alimón con Emiliano Cárdenas. La fiesta culminó con una emocionantísima y colectiva ‘I can’t help falling in love’ y el reglamentario éxtasis final de ‘Jhonny B. Goode’, con todos los colaboradores sobre el escenario. A este culmen apoteósico se sumó hasta una veintena aproximada de amigos y amigas, entre los que reconocimos las caras de Andrea Bronston, José Bulevar y algunos miembros de la familia Barranco.

Fotos y vídeos: Manolo Sonseca Ajo.