Después de charlar con Magda y Alberto, dos de sus colegas de la asociación musical Xauen Bangers, tocaba seguir disfrutando de las cervezas de una marca local en una Plaza de Santa María -junto a la Catedral de Jaén- cada vez más animada… y ruidosa (alarmas, campanadas y los botellines de rigor). Esta vez el invitado era Víctor de la Chica, cantante, guitarrista y fundador de Witchtower, uno de los primeros nombres de grupos que surgen cuando pensamos en esta provincia andaluza.

Víctor comenzó la entrevista destacando que, pese a nuestras palabras de reconocimiento al papel que Witchtower juega en las escena metalera de Jaén, también hay otras bandas compañeras que están ayudando a poner la capital y provincia en el mapa del estilo a escala nacional. A continuación le preguntamos por su adscripción a una etiqueta tan concreta como la de la NWOBHM (New Wave of British Heavy Metal), con la que ha logrado una identificación casi mimética. El cantante y guitarrista de la formación reveló algunos de los trucos técnicos que ayudan a construir ese sonido retro, sin que éste resulte anacrónico ni impostado:

 

La especialización tiene sus cosas buenas… y también sus dificultades. La cambiante formación de Witchtower obedece a la dificultad de encontrar músicos, aunque no tanto por su falta de compromiso, sino por la situación socioeconómica de la provincia, donde cuesta mantener un proyecto común de esta naturaleza. Tampoco es fácil optar por un grado semejante de purismo en los planteamientos, que en el caso de Witchtower se manifiesta en todo lo que hace, desde el diseño gráfico hasta las letras u otras cuestiones aparentemente menores. Víctor contesta a ambas dudas con la sinceridad que le caracteriza:

De cara a mantener un espíritu de independencia y autogestion, Witchtower ha optado por publicar sus discos en formatos que protegen la singularidad de su propuesta. El asunto de las tiradas limitadas o de la distribución directa divide a los aficionados, aunque Víctor las justifica con razones bastante claras, siempre con el objetivo de proteger la difusión de su música:

La proyección internacional de Witchtower es consustancial al tipo de banda que representa, una delicatessen para gustos escogidos que sepan y aprecien lo que van a escuchar. De momento, el trabajo hay que desarrollarlo a escala local o continental, especialmente con la ayuda de los clubes metaleros. Hablamos de esas entidades no lucrativas, siempre dispuestas a echar una mano a las formaciones emergentes o con una trayectoria coherente y honesta. Víctor de la Chica no tiene más que palabras de agradecimiento hacia ellos:

Ya para finalizar, quisimos saber la opinión de Víctor respecto al movimiento musical en Jaén, máxime cuando éste ha tomado tanta trascendencia con la celebración anual del Rock & Metal Encounter. Luces y sombras de una iniciativa valiosa, que no necesariamente es asimilable ni comparable al 100% con lo que sucede en las calles y locales de ensayo de todo el territorio provincial.

 

La entrevista con Víctor fue realizada el pasado viernes 8 de marzo, fecha de referencia para situar la actuación junto a Angelus Apatrida a la que se refiere en este bonus en forma de breve audiovisual, en el que el líder de Witchtower nos responde al cuestionario con el mismísimo Ayuntamiento de Jaén a sus espaldas.

Leo Cebrián Sanz