La primera obra musical del cuarteto Shurakay, “Overseas tales” (“Cuentos de ultramar”), está publicada en formato físico (doble CD) y en plataformas digitales: https://linktr.ee/Shurakay. Es un doble trabajo conceptual en el que cada canción cuenta una historia a través de la música, totalmente recomendable para los amantes del Rock Progresivo “o Sinfónico, como se le solía llamar en los setenta”, según palabras de la banda.

Charlamos de nuevo con el batería Santi Bertran para que nos cuente cómo se metió en el mundo de la música y nos mencione a sus grupos bandera.


por Jon Marin


Santi Bertran:  Recuerdo haber hecho triquiñuelas para comprarme un tambor de juguete a los 4 o 5 años, más o menos, o sea, que viene de lejos. Luego me interesé por el fútbol, siempre sin dejar de escuchar música. Un día, a los 14 años, escuche “Mustapha” de Queen y me dio un vuelco la cabeza. Tras dos años de comerle el coco a mi padre, conseguí una batería y ahí empezó todo.

En esa época escuchaba a Queen, Led Zeppelin, Deep Purple, Meat Loaf, Kraftwerk, Golden Earring, The Knack, Cheap Trick, Brand X, algo de jazz y música clásica. Hasta que descubrí a Yes, eso fue una hostia importante en mi vida a nivel musical y espiritual. Evidentemente, siguieron Genesis, en la época Gabriel; Emerson, Lake and Palmer; King Crimson… En estos grupos han estado, creo yo, muchos de los que considero mejores músicos de todos los tiempos, tanto baterías como demás.

Otra faceta seria la fusión o jazz-fusión, música que me gusta mucho a nivel técnico, pero no me toca el alma como los grupos de rock sinfónico. De este estilo, mencionaría a Chick Corea, Herbie Hancock, Joseph Zawinul, algún disco de Miles Davis y, por supuesto, Frank Zappa, uno de los mejores genios del siglo XX.

Seguramente me dejo grupos… bueno, ahora me acuerdo de Uriah Heep, o trabajos de los miembros de estos grupos en solitario. La lista sería enorme. Sí voy a mencionar el disco en solitario del bajista de Yes, Chris Squire, “Fish out of water”, una joya para mí.