A finales de marzo nuestro compañero J. A. Nieto mantuvo una primera conversación con estos buenos chicos y músicos madrileños que conforman Sake Mate. Con toda la ilusión del mundo lanzaron a primeros de este año su tercer disco, “Condenado a libertad”. Llegó la pandemia con su confinamiento y todo lo demás… y creemos conveniente tener una segunda charla para recuperar el pulso de la banda tras estos meses de casi silencio obligado, por lo menos desde lo alto del escenario.


por Jon Marin


¿Cómo creéis que ha evolucionado el panorama del Rock y el Metal desde que empezó la carrera de Sake Mate (2002) hasta hoy? ¿Hay futuro?

Jorge Vázquez (batería): -Hay futuro si nos ponemos de acuerdo en definir qué significa esa palabra para el devenir de la música que a nosotros nos gusta. Los nuevos estilos musicales absurdos están haciendo mucho daño a la música y también a la juventud.

Bronson (guitarrista): -El Rock ha evolucionado muchísimo en tres direcciones: Una es la evolución imparable del sonido, mejor tecnología y todo eso. Otra evolución es la manía de que hay que hacer siempre algo nuevo, esto lleva a innovar y a veces experimentar de un modo extraño, que da como resultado, a veces, cosas muy extrañas y otras inaguantables; pero ahí están, algunas molan mucho. La tercera cosa que ha evolucionado muchísimo es la técnica; la gente pasa horas practicando más escalas, más rapidez…, eso hace que, como son buenos instrumentistas, puedan tocar casi cualquier cosa y por tanto nacen y crecen infinitos grupos-tributo y de versiones, que están muy bien, pero la creatividad muere; copiar es copiar. Son excelentes tocando pero cuando hay que componer hay que tener algo más y eso no se estudia ni se puede practicar; lo tienes que sentir, ver, probar, oír, escribir… y plasmarlo en una canción. Según yo lo veo, hacer un riff con cinco notas y dos solos con tres millones de notas por minuto… eso no es hacer una canción que llegue al corazón.

-Compruebo que mi comentario anterior sobre los grupos de versiones no te ha dejado muy tranquilo, ¡te has quedado a gusto! Continúa, por favor, Bronson…

-Bueno, en nuestro caso, como ya se ha demostrado muchas veces, el futuro siempre es incierto. Desgraciadamente dependemos de muchos factores; que en cuanto uno se vuelve del revés, la cosa se atasca.

Alberto Mesa (cantante): -Creo que ha evolucionado para mal. La gente no escucha nunca cosas nuevas, sólo escuchan a los que ya son grandes y si no cambia la forma de entender esto en los rockeros y metaleros, en poco tiempo estaremos muy mal. Sin un relevo generacional, esto morirá.

Alberto Andrés (guitarrista): -Ahora hay muchas más bandas porque es más fácil llegar al público. Pero eso hace que sea mucho más difícil destacar. Si a esto añades que el apoyo al género es casi nulo en los medios… hay futuro, pero un poco negro.

Sobre la importancia de los videoclips me comentan…

J: -Tenemos varios y, por supuesto, seguiremos haciendo más; entre otras cosas porque nos lo pasamos pipa y esto lo hacemos primero por nosotros y luego para el resto.

B: -En esta era, nos guste o no, hay que hacer videoclips porque el mundo demanda ver cosas, no solo oírlas. Nosotros, de todas formas, así es, nos lo pasamos bomba grabando y seguro que habrá más.

AM: -Estamos ya preparando el próximo pero no te vamos a decir qué tema será.

Pues… una fija: Contadnos alguna anécdota divertida.

J: -Una vez, en Santander, nos cargamos un guitarrón que había en el escenario, propiedad de la sala. Las pasamos canutas, ja, ja… ¡Y encima estos desgraciados me echaban a mí la culpa! Ya se sabe, el batería siempre tiene la culpa de todo. ¡Cabrones!

B: -En Albacete, volviendo del concierto a las 5 h. de la mañana, me pararon para un control de alcoholemia. Jorge casi se muere del infarto porque él sí que estaba chuzo total con el bajista que venía con nosotros ese día. Yo también llevaba varias cervezas encima, pero algo hace que no me afecte casi… Y me gusta conducir. De modo que soplé y di cero, como siempre.  ¡Estos alucinaban… y el guardia más, ja, ja…!

AA: -También se podría contar mucho del covid-19 y Sake Mate, pero mejor lo dejamos para otro día.

Y otra habitual: ¿En cuál de estos mercados os gustaría más triunfar? ¿EE. UU., Hispanoamérica, Europa o Japón?

J: -En Hispanoamérica tenemos bastantes seguidores, afortunadamente. ¡Y en Japón incluso ponen nuestros vídeos y discos en páginas eróticas, ja, ja…!

B: -Ahora mismo me vale con Europa, está más cerca para las giras y todo eso, je, je…

AM: -Hispanoamérica.

AA: -Es casi un imposible porque el género está casi muerto por allí, pero triunfar en EE. UU. sería una pasada.

Óscar Díaz (bajista): -En Europa.

Acabamos casi. Resumiendo, ¿cuáles son los planes de Sake Mate a corto y medio plazo?

J: -Seguir pasándolo bien y a asaltar un gran festival, tipo Leyendas del Rock, pues siempre nos ha faltado un poquito para estar y creo que ha llegado el momento.

B: -A corto plazo, empezar la gira de una vez y poder tocar por fin en un festival grande. A medio plazo, empezar con el disco nuevo… y ya veremos.

AM: -¡Acabar con la pandemia y salvar el mundo!, ja, ja… ¿Planes? Pues hacer una gira y, una vez mostrado nuestro directo con este disco, preparar el siguiente.

AA: -Sí, tocar, tocar y tocar.

O: -Y seguir componiendo.

Al final llegan los deseos y los consejos o peticiones a los seguidores.

J: -Si queremos que la música Rock no acabe extinguida, tenemos que dejar de lloriquear y empezar a apoyarnos nosotros mismos desde abajo. De banda a banda, sobre todo, y esto por desgracia no está ocurriendo.

B: -Yo sí voy a lloriquear: Es una desgracia que para triunfar no baste con ser bueno y tener buenas canciones y producciones. Si no eres amigo de alguien o conoces o te presentan a tal o cual tipo, nunca llegarás a triunfar de verdad. Y eso es triste. Al final te dedicas a lo que te gusta y a hacerlo lo mejor posible. En cualquier caso, gracias a todos lo fans que nos apoyan y nos siguen aunque sea desde la distancia. Rock on!

J: -¡Salud y Rock para todos!

AA: -Si no habéis escuchado aún el disco, no sé a qué esperáis. ¡Corred, insensatos!