Pregúntame por un músico español que sea honesto, fiel a sus principios, luchador incansable, buena persona, antagónico a lo que conocemos por “estrellita” y unas cuantas cosas buenas más y contestaré: Silver Solórzano.

Además, amigo. En veintisiete años de periodismo ‘rockero’ no he tenido ni un roce con él y, sin ir más lejos en el tiempo, en mi última visita a Madrid en octubre pasado, ahí estaba sentado en una mesa, en una cena, de una selección de amistades sinceras y de verdad que no superaba las quince personas.

Silver ha cruzado el Atlántico para trabajar, algo que merecía desde hace muchísimo. Argentina lo esperaba, pero por lo de siempre, por temas económicos, lo ha tenido que hacer en solitario y no con el resto de su banda para verse allí arropado por excelentes músicos argentinos.

Tras su primera actuación el cantante ha escrito en su página de Facebook: “Sin más que decir, gracias Argentina. Mañana más”.

Pues sin más que decir -de momento- ahí va una selección de sus recientes momentos musicales en Buenos Aires. Y recuerda, Silver: ¡México también te espera!

                Jon Marin

 

(Foto principal: Fotografía Saturno)