Los músicos de Slayer se han juntado de nuevo, lo han hecho oficial y estarán otra vez sobre un escenario en septiembre.

La banda hizo su último concierto en noviembre de 2019 con Tom Araya (bajo, voz), Kerry King (guitarra), Gary Holt (guitarra) y Paul Bostaph (batería). La misma formación actuará, de momento, en dos festivales del próximo mes de septiembre: Riot Fest y Louder Than Life.

Tom Araya acaba de declarar: “Nada se compara con los 90 minutos en los que estamos en el escenario tocando en directo, compartiendo esa intensa energía con nuestros seguidores”.

A lo que Kerry King ha añadido: “Y para ser honesto, lo extrañamos. Me he perdido durante este tiempo estar en los escenarios, sin duda. Esto significa mucho para nuestros fans y ellos significan mucho para nosotros, han pasado cinco años desde que los vimos por última vez».

Las dos fechas exactas anunciadas hasta el momento son en EE. UU.:

22 de septiembre – Riot Fest – Chicago (IL) y 27 de septiembre – Louder Than Life – Louisville (KY).


A principios de este mes, Kerry King (59 años) reconoció que no había estado en contacto con Tom desde que Slayer realizó su último concierto hace más de cuatro años, lo cual despista por lo rápido que se han hecho las cosas si así era. Pero el guitarrista confirmaba que no se habían cruzado ni un wasap ni un correo electrónico desde el último show que hicieron, algo que sí había hecho con los otros miembros de la banda.

También dijo que estaba segurísimo de que Slayer no grabaría otro disco, sobre todo, porque él estaba enfocado en un proyecto nuevo. Y respecto a una posible reunión sobre las tablas –como ahora sí se confirma- también fue tajante: «Estoy bastante seguro de que eso no va a suceder. Propuestas habría, pero no es lo que estoy buscando ahora. Ahora estoy preparando mi banda solista y espero estar centrado en ella durante los diez años próximos, al menos».

En una entrevista King dejó claro que si Slayer había dejado de tocar era por decisión de Araya: “No me lo esperaba. Pero si había tomado esa decisión, no iba a tratar de disuadirle porque, de otro modo, si continuara por imposición, su corazón no iba a estar en esto».

Respecto a por qué Tom había decidido retirarse, Kerry dijo: «Creo que es sólo el desgaste de la carretera, creo que quería más estar en casa. A ninguno de nosotros nos gusta ser el centro de atención, a él tampoco, pero asumía el papel. Alguien tenía hacerlo».

Kerry también confirmó que las diferencias de personalidad contribuyeron a la separación de Slayer en 2019: “Tom y yo nunca hemos estado en lo mismo. Si yo quiero un batido de chocolate, él lo quiere de vainilla. Si yo digo que el cielo es azul, él va a decir que lo ve blanco. Y estas diferencias, con los años, van creciendo”.