Resulta paradójico que apenas 24 horas antes del anuncio del adiós de Asfalto a los escenarios y los estudios de grabación, el nombre del grupo no fuera citado en el coloquio posterior a la presentación del libro “Viva el Rollo!”, escrito por el músico de Gabinete Caligari, Edi Clavo. El batería ha tenido la valentía de salirse del relato oficial de la música de los años 70 y 80 en España al hacer lo que nadie se ha atrevido hasta ahora: establecer un puente entre lo vivido en los primeros años de la Transición y lo sucedido durante la ya sobadísima Movida.

Este ensayo publicado por Sílex Ediciones abre pues “el melón” de una interpretación más amplia y realista de cómo sucedió todo en la contracultura patria. Nada nace sin precedentes ni causas y, les guste o no a los gurús de la crítica musical española, lo que un día fue Nueva Ola hundía sus raíces en la agitación de los años previos a todo lo sucedido en torno a Chapa-Discos o los festivales tardo-hippies que inundaron el primer lustro de la democracia.

Esta modélica “no-ficción” se subtitula “Una crónica de Rock & Rollo en la España de 1975” y tiene una lógica muy sencilla: el músico y motero superaba en edad a algunos de sus compañeros y compañeras del Madrid del Rock-Ola, por lo que ya había vivido muchos conciertos y agitaciones culturales con anterioridad a su conversión posterior el Rock Gótico de los primeros Gabinete.

La mesa de debate celebrada en la madrileña librería musical El Argonauta tuvo como poco afortunado invitado a Jesús Ordovás, curiosamente uno de los grandes responsables del olvido del “Rrollo” -con o sin dos “erres”-. Fue curioso verle esquivar constantemente cualquier referencia a los precursores del Rock Urbano o Duro y regresar una y otra vez a su mantra de la Movida, con las habituales loas a Siniestro Total y los Ramones, como si todo aquello hubiera surgido por generación espontánea.

El locutor estaba de hecho arropado por la presencia de algunos compañeros del ambiente moderno, como varios componentes de Los Nikis, Luis “Lobo Negro”, Beatriz Alonso -autora del excelente documental “De un tiempo libre a esta parte”- o Carlos Cavestany, presentador y director del programa de YouTube «Casa Cavestany». Menos mal que también se hizo un hueco el verbo e ingenio inagotables de Javier García-Pelayo para animar un relato que no terminaba de encontrar su coherencia desde la mesa de ponentes.  

Leo Cebrián Sanz