Continuamos ofreciendo este seguimiento en tiempo real del proceso de grabación de un disco por parte de un grupo musical, cuyo nombre sólo se desvelará al final de la serie. El valor del testimonio anónimo se ha revelado muy interesante, ya que son vivencias y sensaciones que ha podido experimentar cualquier músico que haya pasado por una situación similar o bien las vaya a vivir en persona en algún momento de su carrera artística.

Vamos pues con lo sucedido en las dos jornadas iniciales, en las que la banda toma un contacto efectivo con el estudio, el ingeniero de sonido y las primeras rutinas de trabajo.

 


 

Lunes, 19 de febrero de 2018

 

PRIMER DÍA, MUCHOS PREPARATIVOS Y POCA PRODUCCIÓN

El disco tiene ocho temas y la verdad es que la tarde ha sido poco productiva. Mucha preparación cableando, preparando la batería, ecualizando… y nos han dado las 18:30. No habíamos grabado nada, pero estas cosas son necesarias.

Hemos empezado a grabar a lo bestia, como queríamos. Hemos grabado un tema de batería, pero ha habido que hacerlo sobre una pista pregrabada de guitarra, grabada a metrónomo. De esta forma, el batería sí que ha podido grabar sobre ella. La verdad es que estaba muy nervioso, supernervioso… Hace dos años y medio que no grabamos en estudio y todo cambia. Batería diferente, pedales diferentes, todo distinto… A ver, todo es más cómodo, pero estamos acostumbrados a nuestras mierdas y cuando todo va bien, no sé…, será que no estás acostumbrado.

El caso es que solamente hemos grabado las baterías de un tema y después, durante la horita que nos quedaba, nos hemos puesto a grabar seis pistas de guitarra a metrónomo. La voz se ha tenido que ir, nos hemos tenido que arreglar sin la pista de voz de fondo y, bueno, nos hemos encontrado con una sensación rara… de primer contacto. En definitiva, hemos terminado la pista de batería de un tema y las pistas sucias de guitarra de seis temas. Complicado pero, como siempre, una experiencia brutal.

Como detalle curioso, llevábamos ese Excel que comenté con todos los tempos y los compases. El técnico, que es un profesional cojonudo, ya empieza a escucharnos y a entender los temas y lo curioso es que ha mandado la tablet a la mierda. Ha empezado a sacar las telas: “esto es un 3×4, un 4×4 hasta 200 pulsaciones…“. Me vuelve a decir: “toca”. Total, que todos los tempos estaban mal.

Durante uno de los temas más complejos que hemos podido grabar hoy, me dice: “pero esto…, ¿esto qué compás es?” y le contesto: “creo que es un 3×4”. Y total, que me pongo a grabarlo con una base de 4×4 y al final resulta que era un 7×5. “Pero qué coño, si no sabía que existiera ese compás”. Pues bien, parece que un tema tiene una base de solo y un acompañamiento de la intro en un 7×5. Sabíamos que era más complejo el disco, pero tanto, tanto…

 

La anécdota

Nos hemos “colau”. El batería quería tocar con sus pedales y, al abrir las maletas, descubrimos que los pedales se habían quedado en el origen. Menos mal que el despliegue de medios que hay en el estudio es brutal y él es muy profesional. Cuando se puso nervioso, hablé con él y de un tirón se puso a tocar de maravilla.

 

El coletazo

Cuando el técnico ha escuchado todo, ha dicho: “Uff, esto ha evolucionado, ¿eh?”.

 


 

Martes, 20 de febrero de 2018

 

SEÑORES… SÍRVANSE. EL ESTUDIO ES SUYO

Buenas noches.

Ha sido un día muy guapo. Desde primera hora todo ha empezado a salir correctamente. Yo me he puesto a grabar las pistas de guitarra a metrónomo que me tenía que meter a grabar y me he encontrado con la *****… Yo sabía que los temas eran más complejos, pero no sabía hasta qué punto. Cuando hemos empezado a hacer las pistas, nos hemos encontrado con cambios de tempo en rampa “que ni yo mismo sabía que existiera ese concepto”.

Nos hemos encontrado con temas complicados -concretamente los dos últimos-, en los que todavía no se está grabando la batería. En uno de ellos hay una sección de medio minuto con cinco cambios de compás, o sea, 3×4 y 5×4 en 40 segundos. Los tempos en rampa para arriba y para abajo…, una autentica burrada. Pero en fin, se han grabado y las bases han quedado geniales.

La anécdota

Al técnico le ha surgido un contratiempo y como hay confianza nos ha dejado solos en el estudio. Nos ha dicho: “así es para grabar, así para borrar…”, y nos hemos encontrado en plan self service. Cuando ha vuelto, se ha encontrado con varios temas grabados a lo bestia… (risas), por lo que los ha vuelto a grabar otra vez.

Cuando ha llegado la hora de irse, como es muy buen profesional, se ha quedado una hora más. Ayer el batería, que es un bestia, finiquitó un tema y hoy ha hecho lo mismo con otros cuatro más y casi casi ha terminado con el sexto. Mañana nos queda terminar ese último de los ocho que son y rematar con los dos temas más complicados.

Alucino con el batería del grupo. No será el mejor batería del mundo, pero para mí sí lo es. Se ha marcado redobles que no había hecho en los ensayos, se ha marcado tempos… ¡Uff, es un monstruo! Este tío trabaja en un puesto físicamente muy duro. Viene sin comer, porque no le da tiempo para estar a las cuatro. Viene reventado y se tira cuatro horas dándole y, como se ve en la foto, rompiendo baqueta. Gran mañana y tarde. A ver si terminamos con las baterías y comenzamos con los bajos.