Espiral es el representante del buen Heavy Rock hecho en Ceuta y nos ha regalado recientemente un disco (“Cuando vuelve el sol”) muy ameno para todos los amantes del género que no buscan extremismos estilísticos ni florituras modernas.

por Jon Marin

Viene de: https://losmejoresrock.com/espiral-entrevista-i/

¿Cómo fue la grabación del disco?

Alberto Mateos: -La grabación fue lenta, no teníamos prisa, y cómoda. Estábamos en un estudio que era como nuestra casa. Francis Aliaga, productor y dueño del Estudio Tritón, es amigo nuestro de toda la vida y nos lo puso muy fácil, aunque también nos exigía. Es un técnico muy exigente y siempre trata de encontrar el sonido del grupo.  Nosotros estamos muy satisfechos con su trabajo ya que le ha dado al álbum la personalidad de Espiral, ha sabido conectar lo técnico con lo artístico y eso no siempre se consigue.

Habéis optado por el formato CD, ¿cómo se puede comprar? ¿Y qué otras opciones hay de escucharlo?

Rogelio Mateo: -Quien esté interesado en adquirir nuestro nuevo disco podrá hacerlo a través del e-mail espiralceuta@gmail.com, o bien a través del messenger de la banda, donde atenderemos todos los pedidos con envíos a todo el mundo. En nuestra ciudad, Ceuta, tenemos un punto de venta físico en el establecimiento Frikiwiki y en Oporto (Portugal) en la tienda de discos Bunker Store. También puede adquirirse digitalmente en las principales plataformas de compra online. Y si deseas darle una escucha a nuestro disco, también podrás hacerlo a través de YouTube y Spotify.

¿Seríais capaces de mencionar cada uno cuál es vuestro tema favorito de “Cuando vuelve el sol”?

A: -Cada miembro del grupo tiene sus temas preferidos y, a la vez, no se corta ningún dedo. Los viejos temas se han transformado y cada uno tiene una característica que lo hace especial. El tema «Cuando vuelve el sol», aparte de su calidad, quizá sea en el que todos más expectativas tenemos por ser el que abre la nueva era. «Alas del silencio» ocupa un lugar destacado en los corazones de los miembros de la banda por la dualidad entre dulzura en su lírica y su acidez en el estribillo. «Contratiempo» envuelve en sí misma sensaciones mezcladas; su letra tiene mucho significado aunque deja la puerta abierta para cualquier interpretación personal. «Cuento de hadas podridas» es una pasada en todos los sentidos; musicalmente es un cañonazo de ritmos, riffs, solos de guitarra y con letra desgarradora. Le tenemos mucho cariño también a «Una noche más», canción que cierra el álbum; es una versión del grupo ceutí de los ochenta Tharna. Espiral ha sabido, con todos los respetos a sus creadores, hacerla suya. En definitiva, nos cuesta mucho elegir alguno de nuestros temas.

-Ya, ya veo…

El CD salió el 1 de junio, en plena crisis del coronavirus. ¿Cómo os ha afectado personalmente el confinamiento? ¿Y al grupo, os ha jodido fechas de conciertos?

A: -Cuando empezamos a grabar el álbum, verano de 2019, no había en el mundo la más mínima sospecha de que iba a pasar todo lo que está pasando. Terminamos la grabación y empezamos la fase de fábrica para su edición. En ese momento ocurre todo y cuando lo tenemos editado nos planteamos qué hacer: si dejarlo todo hasta que pasara la tormenta o embarcarnos hacia la tempestad y promocionarlo en medio de la pandemia. Afortunadamente decidimos promocionar. Como todo el mundo, a nivel personal, lo hemos pasado mal… ¡y lo que nos queda! Seguimos aguantando y a esperar. Musicalmente nos ha afectado mucho teniendo en cuenta que el disco está funcionando muy bien no sólo a nivel nacional sino también internacional, sobre todo en el ámbito hispanoamericano. En junio teníamos programada la presentación del álbum en nuestra ciudad con la participación de dos bandas rockeras portuguesas y alguna local. En octubre teníamos programados dos conciertos en Portugal (Lisboa y Oporto). Había algunas citas más cerradas que, lógicamente, han sido canceladas.

Por desgracia, supongo que la agenda sigue en blanco hasta que el panorama se aclare.

A: -Así es. Dadas las circunstancias, no tenemos ningún concierto programado. Solo nos queda seguir promocionando el disco y esperar a ver qué pasa. De todas formas, aprovechamos la ocasión para ofrecernos, en caso de que las circunstancias sean favorables, a cualquier promotora de conciertos. Si quieren contar con Espiral, allí estaremos.

-¿Hay alguien ahí?

Pensemos en la época buena. ¿Qué tipo de público tiene Espiral en los conciertos?

A: -El público de cualquier grupo de Rock, de Heavy o de cualquier otro estilo dentro de nuestro ámbito. La peculiaridad de Espiral es que no se ciñe a un estilo concreto, puede encajar en cualquier aficionado al Rock de cualquier tendencia. Nuestro público es cualquier persona amante del Rock en general.

Cuando hablamos con grupos de Canarias y Baleares siempre sale el tema de la insularidad y lo que dificulta que una formación se dé a conocer y expanda, sobre todo en directo. El hecho de vivir en Ceuta parece que lo hace tan o más complicado. ¿Es así?

A: -La insularidad, hablando en términos musicales y sobre todo rockeros, no es complicada… ¡es una putada! Nos separa el mar y eso siempre es una barrera, una inferioridad con otros grupos peninsulares que tienen más fáciles sus movimientos y sus oportunidades para tocar en otras localidades que no sean la suya. No cabe duda de que internet ha abierto las puertas a muchos artistas que, de otra forma, estaban condenados al ostracismo por esa separación. En Ceuta, a lo largo de estas décadas, se han forjado grandes bandas de Rock que no tuvieron la oportunidad de enseñar lo que hacían por tener el Estrecho de Gibraltar delante. Todo se hubiera arreglado con dinero, pero de eso no había. Ahora podemos enseñar al mundo nuestra música, pero, en principio, no hay más. Nosotros estamos intentando gritaros a todos que en Ceuta se hace Rock y que Espiral os quiere enseñar lo que hace. Llamadnos y allí estaremos.

-Repito: ¿Hay alguien ahí?

¿Entonces sí hay ambiente musical y rockero en vuestra ciudad?

A: -Sí, en Ceuta hay muy buen ambiente rockero. Los grupos ceutíes se han sentido siempre apoyados por su gente. Pero hay que tener en cuenta que Ceuta es una ciudad pequeña y los aficionados rockeros, aunque buenos, no son muchos. En cualquier concierto de los nuestros y otras bandas locales nuestro público está ahí y nos hace más fácil toda esta lucha.

(Continuará).